Esta situación ha llevado al anciano a tener pensamientos negativos.
Un anciano, de nombre Segundino Castro Mercedes de 78 años, oriundo de Payamarca, lloraba desconsoladamente sentado en una de las esquinas del Jr. Balta de la ciudad de Huamachuco, en La Libertad.
Explicó que hace unos meses, el 4 de diciembre falleció su mujer y el 7 de julio su hijo, quien se dedicaba a ayudarlo y a cuidarlo. Ahora se siente solo y acorralado, la situación lo atormenta. Su tristeza va en aumento debido a la codicia de sus 5 hijos restantes, pues le exigen que les entregue ya la parte de la herencia que dicen le corresponde a cada uno de ellos antes de que fallezca.
Castro Mercedes expresó, “Son mis hijos, yo sé qué tienen derecho, pero… ya no aguanto más. Yo les he dicho que les voy a dar, pero que al menos pase este año por la pandemia. Lo que pasa es que deben pues”.
Castro Mercedes es un hombre de la tercera edad, que se encuentra en ese grupo de riesgo de la población vulnerable en estos tiempos de pandemia, por lo que es preciso que se cuide y no se exponga al virus, pero no le queda otra opción que vender huevos de gallina de corral en plena vía pública para así poder cubrir sus gastos.
Este anciano necesita ayuda para poder afrontar la codicia de sus hijos, pues los problemas en los que se encuentra sumido lo han llevado a tener pensamientos negativos.