Andrés Hurtado, conocido como ‘Chibolín’, es el apoderado legal de Demetrio Chávez Peñaherrera, alias ‘Vaticano’, exsentenciado por narcotráfico, según registros públicos.
Según la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp), Andrés Hurtado, conocido por su nombre artístico ‘Chibolín’, ha sido el representante legal de Demetrio Chávez Peñaherrera, alias ‘Vaticano’, un exconvicto por narcotráfico. Desde 2019, el presentador de televisión tiene poder para gestionar los bienes y realizar trámites bancarios y notariales en nombre de Chávez Peñaherrera.
Representación legal y funciones como manager
De acuerdo a los documentos obtenidos por Cuarto Poder, además de manejar sus propiedades, Hurtado también tiene la autoridad para actuar como manager de ‘Vaticano’. «Para lo cual el apoderado podrá negociar, transar, pactar las formas y condiciones del contrato, los importes, formas de pago y demás condiciones que se estipulen», se detalla en la escritura pública fechada el 11 de junio de 2019.
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Hurtado no ha ofrecido declaraciones sobre su rol como representante de Chávez Peñaherrera, quien salió de prisión en 2016 tras cumplir 22 años por tráfico de drogas. En 1994, Chávez fue arrestado en Cali, Colombia, y extraditado a Perú.
La conexión entre Hurtado y ‘Vaticano’
Ese mismo año, Hurtado fue detenido por presuntos vínculos con Chávez Peñaherrera, aunque nunca fue condenado. El presentador ha admitido que eran amigos y reveló que el exasesor presidencial Vladimiro Montesinos lo odiaba por esta amistad. «Chibolín ha reconocido que era su amigo y reveló que Vladimiro Montesinos, quien asesoró al exdictador Alberto Fujimori, lo odiaba por eso». En 1996, Chávez afirmó en una audiencia que pagaba 50 mil dólares a Montesinos. Esto con el objetivo de permitirle exportar drogas a Colombia, pero el acuerdo se rompió cuando el exasesor exigió más dinero. En una audiencia del 16 de agosto de 1996, Demetrio Chávez dijo que pagaba US$ 50 mil al exasesor de Fujimori para que le permita exportar droga en avionetas a Colombia, pero esa trato se habría roto porque Montesinos habría solicitado más dinero y Vaticano se negó.
Investigación por tráfico de influencias
Recientemente, esta relación ha cobrado relevancia en medio de una investigación en curso sobre un presunto soborno de un millón de dólares que Hurtado habría solicitado para interceder en el desembargo de 100 kilogramos de oro. El empresario Javier Miu Lei, propietario del oro, ha negado cualquier relación con Hurtado.
La investigación, liderada por el fiscal José Manuel Espinoza Vin, también abarca posibles delitos de cohecho y tráfico de influencias. Además, se analiza la conexión de Hurtado con importantes figuras como Roxana del Águila, exjefa de Migraciones, Walter Ríos, expresidente de la Corte del Callao, y María La Rosa Sánchez, presidenta de la Corte de Lima.
Nexos con Migraciones
Entre 2019 y 2021, época en que Hurtado fue nombrado apoderado de Chávez, llevó a varios conocidos a la oficina de Migraciones. En particular, el presentador visitó la institución acompañado por el empresario César Mercado Alvarado, quien meses después obtuvo un contrato con el Estado por 60 mil soles.
El dinero desaparecido
En otro ángulo de esta investigación, el productor del programa de Hurtado, Abrahan Mina Recabarren, declaró a la policía sobre un envío de 6 mil dólares en efectivo a través de un servicio de mensajería, que nunca llegó a su destino en Surco. «Pidió un servicio de transporte Glovo por aplicativo. Haciéndose presenta una persona con tez clara (…). Él mismo que fue entrevistado por la persona de André Hurtado Grados, el mismo que le entregó una caja color negro redondo en cuyo interior había la suma de US$ 6.000», detalló Recabarren.
Esa suma de dinero debía llegar a una casa de Surco, pero jamás sucedió ello. No se sabe, hasta ahora, a qué manos llegaron.
