Afirman que no existen garantías y se pone en riesgo seguridad de las personas
La compañía minera Antamina anunció ayer la suspensión de sus operaciones, debido al paro que acata un grupo de comuneros en el distrito de Aquia, provincia de Bolognesi (Áncash) desde hace una semana.
A través de un comunicado, la compañía minera indicó que actualmente “no existen garantías” para que realicen sus operaciones, dada la medida de fuerza adoptada por los comuneros.
Ante esta situación solicitaron al Gobierno a que tome el control de la situación y que restablezca el diálogo y entendimiento en la zona. “Mientras estas condiciones no se alcancen, no podemos seguir operando. La seguridad, la vida y la salud de todos, sin excepción, es lo más importante para Antamina”, señalaron.
Precisaron, además, que con esta decisión buscan evitar que se afecte la integridad física de las personas. “No queremos esperar a que ocurran hechos que pongan en riesgo la integridad física de nadie. Tampoco que se registren incursiones que afecten los bienes de terceros o nuestras instalaciones”, se lee en el documento.
FALSAS ACUSACIONES
Añadieron que, desde el inicio de la protesta se han mostrado con disposición a escuchar las demandas, pero que se les respondió con falsas acusaciones y violencia.
“Hemos tendido la mano en busca de acuerdos y nos han respondido con falsos señalamientos. Más preocupante aún, hemos sido objeto de acciones violentas y recibido veladas amenazas de generar más violencia; todo esto mientras se anuncian supuestas “alianzas” entre malos dirigentes para seguir generando alteraciones de la paz social”, señaló Antamina.
La comunidad campesina de Aquia inició el paro contra la minera Antamina el domingo pasado, por una presunta usurpación ilegal de tierras e incumplimiento de su responsabilidad social, acusaciones que la empresa minera ha rechazado, incluso con documentos.