Trujillo está pasando por un estado de emergencia por actos delincuenciales y este atentado lo dificulta más.
En medio de la persistente ola de extorsiones que afecta a Trujillo, un nuevo incidente ha conmocionado a la ciudad. Esta vez, un colegio de nivel inicial en proceso de construcción fue blanco de un atentado con explosivos, marcando así la segunda ocasión en que criminales ejercen coacción contra los responsables de esta obra educativa.
A pesar de las medidas implementadas, como el estado de emergencia y el aumento de agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP), las extorsiones continúan en La Libertad, especialmente en la ciudad de Trujillo. Según reportes, el incidente ocurrió en la Institución Educativa 1692, ubicada en el sector La Bombonera del distrito de Florencia de Mora.
Testimonios de vecinos cercanos describen el terror vivido: «Anoche, nosotros estábamos tranquilos en casa cuando, de repente, sonó una bomba; una explosión fuerte. Nosotros nos asustamos y salimos a ver dónde fue. Debe ser acá porque es el único lugar donde están construyendo. La gente no puede dejar trabajar tranquilo porque no es justo que nosotros pasemos por estas cosas, y hay niños chiquitos que se asustan también. La explosión fue dentro de la obra”, expresó uno de los testigos.
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Este no es el primer episodio de violencia relacionado con esta obra. El pasado 06 de marzo, individuos desconocidos dispararon contra un trabajador en el mismo lugar. Ante estos hechos, las autoridades están considerando la posibilidad de que estos ataques sean parte de una extorsión dirigida a la empresa encargada de la construcción.
La situación de extorsión en Trujillo se ha vuelto una preocupación constante. Bandas criminales han fijado sus objetivos en empresas constructoras, particularmente aquellas involucradas en proyectos educativos. Varios proyectos que buscan mejorar la calidad educativa y contribuir al desarrollo de los niños se han visto interrumpidos debido a estas demandas económicas y amenazas de daño.
La institución educativa San José School, en la urbanización La Rinconada, también fue objeto de un acto intimidatorio, donde se exigió el pago de una suma considerable bajo amenaza de violencia. Esta situación se replica en al menos otros 11 centros educativos de la región, siendo solo ocho de ellos los que han formalizado denuncias ante la División de Investigación Criminal (Divincri).
Entre los centros afectados se encuentran el Jardín 2169 y el colegio Reyna de los Ángeles en El Porvenir, así como la institución educativa Túpac Amaru en Alto Mochica, entre otros. La Policía Nacional ha identificado a ‘Los Pulpos’, una organización criminal liderada por Johnson Smith Cruz Torres, como posibles autores de estos actos extorsivos, aunque no se descarta la participación de otros grupos delictivos en la región.
Este preocupante panorama refleja una problemática arraigada en Trujillo, donde la violencia y la extorsión amenazan la estabilidad y el desarrollo de la comunidad educativa.
