Pertenecerían a los parqueros de Pataz, dedicados a la extorsión y minería ilegal
La Policía Nacional detuvo en el centro poblado Pueblo Nuevo, en la sierra de Pataz, en la región La Libertad, a siete sicarios pertenecientes a la conocida banda Los Parqueros de Pataz, en posesión de dos armas de largo alcance AR- 15, una camioneta de placa BPB-793, y más de cien municiones guardadas en cuatro bolsas, que serían responsables de 16 asesinados cometidos en la región en el 2023.
Según el coronel PNP Francisco Vargas, jefe de la III Macrorregión Policial de La Libertad, antes de esta intervención, tras un trabajo de inteligencia, los efectivos policiales, en Huamachuco decomisaron 243 cajas de material explosivo, cuyo peso bordeó las siete toneladas, valorizados, en el mercado negro, en medio millón de soles.
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Las autoridades no lo dicen públicamente, pero tampoco lo niegan: Pataz es una zona de enfrentamientos armados, y la banda de sicarios capturada tendría participación en lo que va del 2023 de por lo menos 26 crímenes, aunque es probable que se trate de una cifra mayor.
Pero este número, para la comunidad liberteña, es ‘engañoso’. El rifle de asalto AR-15, incautado a los detenidos, es el tipo de arma usado en el asesinato de miembros de bandas rivales, mineros ilegales considerados competencia de otros protegidos por las bandas, autoridades e incluso miembros de las fuerzas
Según fuentes policiales, la banda Los Parqueros de Pataz solo sería una de las cinco organizaciones criminales que operan impunemente en la región de Pataz, entre las que mencionan: la Jauría, los Pulpos, los Ochenta, los Malditos de Río Seco y la Banda del Gato Coté, todas dedicadas al sicariato, extorsión, minería ilegal, tráfico ilícito de drogas y otros delitos.