Para ser aceptado se hizo pasar de monseñor que trabajo en zonas rurales de Lima
El vecino país del Ecuador ha sido remecido con la captura del falso sacerdote, Juventino de Jesús Espinoza (56), que se había hecho pasar por monseñor en las zonas rurales de Lima (Perú), y ha sido detenido luego de ser buscado por espacio de tres años por violación sexual a menores, una de las cuales resultó embarazada.
Según la pesquisa policial, Espinoza es ecuatoriano de 56 años, era casado, pero igual se hacía pasar de cura u monseñor y habría tenido residencia en varias ciudades rurales peruanas donde brindada misas virtuales e incluso presenciales.
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El general Roger Pérez, director de Seguridad Ciudadana de la PNP, confirmó que muchas feligreses lo conocían como padre, en el Perú, porque utilizó la indumentaria de la iglesia católica para realizar misas y luego de cruzar información establecimos que era el mismo que había tenido problemas policiales en Ecuador.
Estuvo en territorio peruano durante cuatro años ofreciendo las misas, mientras que en el país vecino publicaba información de una supuesta iglesia que había formado, así lo evidenciaba en redes sociales. Para las autoridades, su integración a la religión le permitió tener contacto con menores de edad, de quienes había abusado.
En Ecuador, hay tres denuncias que acusan a Juventino de Jesús Espinoza de haber ultrajado a niñas y jóvenes en su condición de “sacerdote”.
Asimismo, se reveló que en el 2019 que llegó al Perú estuvo acompañado por una menor que estaba en estado de gestación, se presume que Espinoza era el padre. Al cruzar la frontera, se habría establecido en una iglesia del distrito de Puente Piedra, Lima.
Su captura fue en Ecuador por información proporcionada por la policía peruana.