Ante el inminente regreso de Patricia Benavides como Fiscal de la Nación, el sector caviar de la fiscalía está maniobrando para vacarla con apoyo de los fiscales supremos Pablo Sánchez, Juan Carlos Villena y Delia Espinoza y elegir un nuevo titular del Ministerio Público
La Junta de Fiscales Supremos (JFS) sería el escenario de un nuevo escenario para que el sector caviar siga controlando el Ministerio Público y la Fiscalía de la Nación y desde ahí seguir haciendo una cacería de brujas contra sus enemigos políticos.
Existe una alta probabilidad de que la Junta Nacional de Justicia (JNJ), debido a la falta de quorum, no logre destituir ni imponer una nueva suspensión en el cargo a la abogada Liz Patricia Benavides Vargas.
Entonces, el 6 de junio de 2024, Benavides recuperará sus cargos: fiscal suprema titular y Fiscal de la Nación. Ese día vencen los seis meses de suspensión que le impuso la JNJ, el 7 de diciembre de 2023.
El regreso de Benavides a la Fiscalía de la Nación y el Ministerio Público, supondrá una guerra civil interna, es que se acabará el blindaje a favor de Gustavo Gorriti y los fiscales Rafael Vela y José Domingo Pérez por el cerco judicial contra el expresidente Alan García.
Como es natural Patricia Benavides insistirá en hacer los cambios en las fiscalías supremas y en la coordinación y despachos de los equipos especiales que han sido utilizados como instrumento de persecución política y chantaje, liderados por la fiscal Marita Barreto.
La JFS es el máximo órgano de gobierno del Ministerio Público y está integrado por los fiscales supremos titulares. En este momento, Juan Carlos Villena Campana, Pablo Sánchez Velarde y Delia Espinoza Valenzuela integran el pleno de la Junta. El 6 de junio se uniría a ellos Patricia Benavides, reclamando ser la fiscal de la Nación electa.
Entre las funciones de la JFS está la de elegir al fiscal de la Nación por un período de tres años. El mandato de Benavides como fiscal de la Nación vence en junio de 2025.
Al poder nombrar, también se puede retirar la confianza y dar por concluida la elección de un fiscal de la Nación. Esta posibilidad nunca se ha dado antes. Pedro Gonzalo Chávarry prefirió renunciar para no someterse a la Junta.
Pablo Sánchez y Delia Espinoza votarían por la salida de Benavides. La opinión del actual fiscal de la Nación interino es dubitativa. Si decide apoyar a Benavides, habría empate y ella ganaría, al ejercer voto dirimente.
Como quieren mantener el control del Ministerio Público el sector caviar maniobra para lograr el regreso de la fiscal suprema titular Zoraida Ávalos, actualmente inhabilitada.
El juzgado supremo de investigación preparatoria y la fiscalía suprema han resuelto que no cometió ningún delito. La Corte Suprema está por ratificar esa decisión. Sin embargo, se olvidan que la inhabilitación del Congreso es sanción política e irreversible.