Cohete espacial Tianlong-3 tuvo una falla en el sistema informático tras despegue.
Un cohete espacial chino Tianlong-3 sufrió un fallo estructural durante una prueba de lanzamiento este domingo, lo que provocó su caída y posterior desintegración en unas colinas a 1,5 kilómetros al suroeste de la plataforma de pruebas ubicada en las afueras de la ciudad de Gongyi. Afortunadamente, no se reportaron víctimas mortales tras el incidente.
Según un comunicado emitido por Space Pioneer, la compañía responsable del cohete, la falla se originó en la conexión entre el cuerpo del cohete y la plataforma de prueba. Tras el despegue, el sistema informático del Tianlong-3 se apagó automáticamente, lo que provocó la pérdida de control y la posterior caída del vehículo.
Residentes de Gongyi compartieron en redes sociales imágenes del cohete elevándose y dejando una estela de humo antes de precipitarse hacia el suelo y explotar. Pese a la magnitud de la explosión, las instalaciones de pruebas se encuentran alejadas de zonas residenciales y las medidas de seguridad implementadas por Space Pioneer y las autoridades locales, incluyendo la evacuación preventiva de personas en áreas circundantes, evitaron víctimas fatales.
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Este incidente pone de relieve los riesgos inherentes al desarrollo y pruebas de tecnología espacial. Space Pioneer, una de las empresas aeroespaciales privadas chinas que buscan desarrollar cohetes reutilizables de carga media para el ensamblaje de constelaciones de satélites similares a la Starlink de SpaceX, ha asegurado que se llevará a cabo una investigación exhaustiva para determinar la causa exacta del fallo y tomar las medidas correctivas necesarias para evitar futuros incidentes.
El accidente sirve como recordatorio de la importancia de la seguridad y la rigurosidad en el desarrollo de este tipo de tecnología, especialmente a medida que el sector espacial privado continúa creciendo y expandiendo sus actividades.
