Buena hidratación, ventilación y uso de vestimenta holgada disminuirán el riesgo
Ante las elevadas temperaturas que se reportan en algunas regiones del Perú, el
Ministerio de Salud (Minsa) brinda recomendaciones sobre cómo reducir el riesgo de golpe de calor, especialmente en población vulnerable, como niños y
adultos mayores.
Líquidos adecuados
El infectólogo Dr. Manuel Espinoza Silva, del Instituto Nacional de
Salud (INS), explicó que una de las medidas preventivas para evitar el shock térmico es tomar líquidos adecuadamente, aún sin necesidad de tener sed, para mantenernos hidratados. En temporadas de calor es importante ofrecer mayor cantidad de líquidos para beber, sobre todo a niños y adultos mayores.
Agregó que otra recomendación es protegerse del sol con sombrero de ala ancha o una sombrilla y utilizar ropa cómoda (holgada), ligera, de algodón y de colores claros, gafas de sol y mantener la vivienda bien ventilada.
¿Cómo reconocer que estamos siendo afectados por el calor?
Espinoza Silva señala que el golpe de calor es la forma más grave de lesión por calor y puede ocurrir si la temperatura del cuerpo alcanza los 40 C o más.
Los síntomas iniciales pueden no percibirse (mareo y ligera sofocación), llegando a fiebre elevada que no cede con antipiréticos, sed, piel roja y seca o ligeramente húmeda, ritmo cardíaco y respiración rápida, náuseas, vómitos y alteración de la conciencia.
Para disminuir el riesgo, recomienda no exponerse al sol de forma directa entre las 10:00 a. m. y 4:00 p. m., tampoco realizar ejercicios físicos durante esas horas, en todo caso permanecer bajo la sombra. Si la vivienda es pequeña o de techos bajos y calamina, debiera buscarse alojamientos temporales bien ventilados y de techos altos, sobre todo poner a buen recaudo a los niños y adultos mayores. Asimismo, exhortó a no dejar a las mascotas dentro del carro.
De reconocer a alguien que podría estar sufriendo de golpe de calor, Espinoza señala que lo primero que se debe hacer es colocar a la persona en un lugar fresco, retirarle las prendas no necesarias y aplicarle compresas de agua fría para ayudar a reducir la temperatura corporal hasta que pueda ser atendido por un profesional de salud y llevado a un establecimiento para su atención.
El golpe de calor sin tratar puede dañar rápidamente el cerebro, el corazón, los riñones y los músculos, llevando al paciente a la muerte.