El país gobernado por Kim Jong- ha catalogado todo tipo de producción surcoreana como «influencia maligna»
Corea del Norte ejecutó a 30 estudiantes de secundaria por ver dramas surcoreanos, según informes de medios surcoreanos. De acuerdo con la investigación, los programas estaban almacenados en dispositivos USB introducidos al país por desertores norcoreanos.
Un funcionario anónimo del Ministerio de Unificación de Corea del Sur declaró que las autoridades norcoreanas castigan severamente a los residentes basándose en tres leyes «malvadas». Una de estas leyes es la Ley de Rechazo de la Ideología y la Cultura Reaccionarias, que prohíbe la difusión de medios provenientes de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón.
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Corea del Norte y las sentencias
Este no es el primer caso de severas medidas en Corea del Norte. En 2022, un joven de 22 años fue ejecutado públicamente por consumir y distribuir contenido surcoreano, según un informe sobre los derechos humanos en Corea del Norte que recopiló testimonios de 649 desertores norcoreanos.
Según un testigo, el joven fue condenado por escuchar 70 canciones de K-pop, ver tres películas y distribuir dicho contenido, violando una ley de 2020 que prohíbe la «cultura e ideología reaccionaria» con el objetivo de controlar la información externa.
La prohibición del K-pop es parte de un esfuerzo por «proteger» a los norcoreanos de la supuesta influencia «maligna» de la cultura occidental, una política que comenzó bajo Kim Jong-il y se intensificó con Kim Jong-un.
