Bases sostenibles se consolidan en el transporte personal
La industria del transporte terrestre tiene una nueva dinámica tras la pandemia del COVID 19, el alarmante incremento de la delincuencia y la conflictividad social en el interior del país. Hoy los ejes de la seguridad, la innovación tecnológica y el entrenamiento permanente de los operarios del servicio, enfrentan los enormes desafíos que han surgido en esta tercera década del siglo XXI.
En particular, cabe referirse al trasporte del personal que desarrollan algunas empresas como Cruz del Sur en el ámbito de la minería. Esta línea de negocios tiene casi 25 años en el mercado peruano y, a la fecha, cuenta con una flota de 196 unidades, 550 pilotos altamente capacitados y aproximadamente 10 millones de kilómetros recorridos por año.
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“Apostamos por el sector minero reposando sobre principios de sostenibilidad y con foco en una propuesta de valor integral de seguridad, a través de herramientas de gestión y control que permiten reducir o minimizar incidentes en ruta y prevenir accidentes”, señala Juan Kresalja, gerente de Unidad de Transporte Institucional de Cruz del Sur. “El 2023, más de 2 millones de personas han sido transportadas por CDS en la minería, con cero accidentes fatales registrados. Esto solo es posible gracias a una adecuada gestión del riesgo y el uso de la mejor tecnología”, añade.
Como parte de su compromiso por el cuidado del medio ambiente, CDS viene desarrollando demostraciones de buses eléctricos a clientes mineros con el objetivo de incorporarlos de manera definitiva a la flota que transporta al personal en la unidad minera o hacia la misma. La electromovilidad arroja importantes KPI en cuanto a la protección de la salud y el medio ambiente.
Los resultados a obtener en 2024 dependerán del trabajo conjunto que pueda realizarse en el sector, donde empresa privada y el Estado apunten hacia un mismo objetivo: el crecimiento del Perú y su economía.
