Descubre cómo detectar este tipo de males a tiempo, pues el cáncer es una de las enfermedades que se lleva más vidas al año
Descubre cómo darte cuenta si tienes un linfoma, un cáncer a la sangre que es más común en adultos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), fueron alrededor 10 millones de personas que no sobrevivieron a esta enfermedad y sus variaciones.
Este 15 de septiembre, es el Día Mundial de Concientización sobre el Linfoma, es por ello que es importante conocer de qué trata y cómo solucionarlo.
El linfoma están dentro de los tres grupos de cáncer se sangre, aparte de la leucemia y el mieloma. Hay dos dos de esta afección: el linfoma de Hodgkin y el linfoma no Hodgkin.
«Vamos a suponer que el cuerpo es como una casa y la leucemia afecta a la casa entera, mientras el linfoma afecta a una habitación. En un sólo sitio, una parte cuerpo, que son los ganglios», mencionó la doctora Carla Casulo, directora del Programa de Servicio de Linfoma del Instituto de Cáncer Wilmot de la Universidad de Rochester de Nueva York a la BBC.
¿Cómo se propaga el linfoma?
En el caso del linfoma de Hodgkin se extiende ordenadamente de un grupo de ganglios linfáticos a otros. Mientras tanto el linfoma no Hodgkin se esparce a través del sistema linfático desordenadamente, manifestaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
¿Cómo saber si lo padece?
Los síntomas son inflamación de los ganglios linfáticos, en especial en la parte del cuerpo donde comienza a crecer el linfoma.
Las áreas comunes en donde se pueden tocar los ganglios linfáticos con los dedos son la ingle, la axila, el cuello, detrás de los oídos y la parte posterior de la cabeza. Sin embargo, también pueden aparecer en otras partes del cuerpo, como el tórax o el abdomen. También pueden presentar sudores nocturnos, tos, fiebre, picazón y pérdida de peso.
¿Cuál es el tratamiento?
En el caso del linfoma de Hodgkin es uno de los tipos de cáncer que más se curan. Lamentablemente no se puede prevenir, pero se suele diagnosticar entre 20 y 40 años.
Y para el linfoma no Hodgkin el tratamiento depende de las características, ya que hay muchos tipos.
«Felizmente, casi todos los linfomas tienen tratamiento. Hay muy pocos que no se pueden tratar (…) pero lamentablemente no se puede prevenir porque es algo espontáneo», afirma la doctora Carla Casulo.