Por: Phillip Butters /El «coronacaos» y las Fuerzas Armadas / El tercer día de cuarentena hay millones de peruanos que se están poniendo nerviosos, inquietos, porque sienten que se les acaba el dinero. Son los peruanos del’día a día los que cobran diariamente para comprar sus alimentos y el agua a los camiones cisternas.
Hablamos de los peruanos dela economla informal, los taxistas, mototaxistas, motorizados, ambulantes de los que no tienen ni cuenta bancaria, ni están en un Servicio Integral de Salud (SIS) y nunca han estado en el mundo de la Población Económicamente Activa (PEA), como la conocen los economistas.
¿A qué me refiero cuando hablo del ‘coronacaos»? Es muy sencillo.
¡Cómo harán los peruanos cuando se les acabe el dinero? Van a tener que salir a comprar, pero ¿ con qué dinero?
Todo esto nace del sentido común. El gobierno, a través de la ministra de Economía, Maria Antonieta Alva, ha dicho que dará 380 soles a 3 millones de familias.
En el supuesto que eso esté bien distribuido y se ejecute rápidamente, Cómo cobrarán ese dinero los millones de peruanos? Obviamente tendrán que ir a un Banco de la Nación o a otro. Es decir, tendrán que salir a la calle, porque tienen que consumir de inmediato alimentos y productos. ¿No es acaso un contrasentido que en cuarentena salgan 3 millones de personas a la calle?
Ayer ha habido una serie de problemas en diversos mercados porque la gente empezó a especular y a comprar más de lo necesario. Es muy difícil pedirle a la gente que frene ante una situación de carestía.
Por puro racionamiento básico, todos los peruanos que mencione líneas arriba necesitan el ‘efectivo’ para salir a comprar, y si esto no pasa en los próximos dos o tres días, se podría generar situaciones de caos en donde hayan esas personas que pueden ir a saquear.
Pónganse en el pellejo de los que viven en Jicamarca, en San Juan de Lurigancho, Mi Perú o Ventanilla, que están cerca de un Tottus, a un Plaza Vea, o cualquier otro supermercado. ¿Creen que esa gente se quedará quieta sin tener qué comer?
Evidentemente, los policías y militares han tomado las calles. Ellos son peruanos que tienen que cuidar la vida de otros peruanos. Ya hay una serie de personas que pueden salir a las calles pudiendo trabajar libremente como los médicos, enfermeras, los que trabajan en grifos y bancos. Eso está claro.
Pero ¿cómo frenar a una persona que te dice que está yendo 3 comprar comida? Entonces una de las cosas que se tuviera que hacer es medir la posibilidad de que el Ejército, la Marina y la Aviación tengan como número uno, los fondos públicos para comenzar a dar raciones de comida en las zonas mas pobres de Lima y de las provincias del Perú. Me refiero las zonas periféricas donde todavía nova a llegar ese dinero.
Esto ya se hizo antes, en la época del fujimorismo cuando lanzó el «shock». Lo que pasa es que se manejó discretamente para evitar una revuelta social
Los militares están en capacidad de preparar muchísimas raciones. Se calcula unas 80 mil al día por turno, es decir, 240 mil raciones diarias, porque esto es lo más parecido a una situación de guerra.
Reitero, si los comandantes de las Fuerzas Armadas tienen los presupuestos, que salgan a darle de comer la gente mientras se mitiga la situación. Recién estamos al tercer día, imagínense qué pasará en una semana o en 10 días cuando la masa realmente comience a desesperar. Hay que tener criterio, hay que ser prácticos y organizarnos.
Y las instituciones más capaces para una organización de esta envergadura. son definitivamente las Fuerzas Armadas.
Confiemos en que ellos lo van a saber actuar. Vizcarra les tiene que dar los fondos. Obviamente hay que tener mucho cuidado con los saqueos.