Por: Pablo Carranza
Después de que se anunciara el cierre de operaciones del corredor morado que conectaba el populoso distrito de San Juan de Lurigancho con San Isidro, el director de Luz Ámbar Luis Quispe le dijo a La Razón que el modelo de los corredores complementarios es un fracaso por culpa de la Autoridad Autónoma del Transporte Urbano (ATU) y la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML).
¿Por qué el Corredor Morado va a dejar de operar y cuál es su opinión al respecto?
Bueno, es verdad, el problema es digamos complejo. Por un lado hay que señalar que el servicio de transporte urbano, en particular de los cinco corredores complementarios, es un servicio que ha quedado inconcluso. Se implementó en el 2014 con la señora Villarán, dejando de lado el proyecto inicial que eran nueve corredores segregados, BRT’s, a la manera del Metropolitano, y cuando estaba para licitarse el COSAC II, porque el COSAC I ya estaba operando, la señora Villarán cambió de opinión, igual que el expresidente Ollanta Humala, y dejaron de lado la licitación del COSAC II y había que continuar en esa línea. Entonces, la Municipalidad Metropolitana de Lima optó por implementar los cinco corredores complementarios y al licitarlo que son 48 paquetes, solamente se licitó 12. Desde ese entonces a la fecha no se ha vuelto a licitar, es decir, debieron ser 5,000 buses para los corredores complementarios, pero solamente hay 780 buses. Por un lado, esa licitación ha estado muy mal llevada a cabo porque no estaban las condiciones, no eran propietarios de las unidades vehiculares, no había recaudo electrónico, eso fue una decisión política. Si bien es cierto que con el correr del tiempo las empresas han ido mejorando sus servicios, adquiriendo los vehículos, pero por otra parte también se ha ido generando una deuda de parte del Estado.
Háblenos de la deuda, ¿qué les debe exactamente el estado?
El Estado en el contrato se compromete a pagarles si es que ellos no alcanzaban el monto que se fijaba como proyecto en el contrato. Entonces hay una compensación que se obliga a pagar al estado. A los buses del Metropolitano por ejemplo ya se les pagó, a los cuatro consorcios. Lo que pasa es que esos cuatro consorcios fueron a un tribunal arbitral. En cambio, aquí los corredores complementarios optaron por una conversación directa con la autoridad y evidentemente la autoridad no ha cumplido. Si ellos hubieran ido a un tribunal arbitral, probablemente hace rato que hubieran cobrado esa deuda.
Pero ¿Qué entidad debe hacerse cargo de esa deuda?
El Estado, el concedente fue el estado, a través de la MML cuando se dio la licitación, pero cuando se crea la Autoridad Autónoma del Transporte Urbano (ATU) mediante la Ley N° 30900 pasa el activo y pasivo de Protransporte a la ATU, y esta a su vez pertenece al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC). Quien tiene que pagar eso es el MTC.
¿Es viable el modelo de los corredores complementarios o tiene algunos defectos?
Deberían ser 5.000 buses y son menos de 800 buses. Es un tema de ejecución, de que no se ha cumplido todo el plan que se trazó al principio. Es por la ineptitud de las autoridades de turno, desde que se implementó los cinco corredores complementarios, desde la gestión de la señora Villarán hasta ahora ha sido un fracaso.
¿Se puede salvar el tema del Corredor Morado?
Por supuesto, y todos los corredores. Lo que tiene que pagar es el Estado la deuda. El corredor verde tiene otro tipo de problemas. El amarillo no sale porque igualmente la empresa que tenía una cantidad de buses que estaban operando necesitaba que ese servicio fuera reconocido por lo menos en un pre operación.
