Los dirigidos por Pep Guardiola suman otra copa más a sus vitrinas tras vencer al Sevilla en tanda de penales
El Sevilla luchó valientemente hasta el final contra el campeón de la UEFA Champions League. El equipo español tuvo la oportunidad de llevarse el título, ya que se adelantaron en el marcador con un gol de cabeza de En-Nesyri, la destacada estrella marroquí que brilló en el Mundial Qatar 2022. Esta final de la Supercopa europea trajo recuerdos de la última vez que el conjunto sevillano compitió en este torneo en 2020, enfrentando al Bayern Múnich, donde dos oportunidades perdidas les costaron el título.
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La decisión se definió en la tanda de penales, donde Bono, el portero del Sevilla, estuvo cerca de atajar un penal, pero no pudo evitar que el último disparo, a cargo de Gudelj, errara y automáticamente le diera la Supercopa al Manchester City. El camino a los penales se forjó con el poderoso cabezazo de Cole Palmer, quien también marcó en la final de la Community Shield contra el Arsenal.
El escenario de este emocionante partido fue el estadio Giorgios Karaiskakis, donde 1.200 hinchas del Sevilla se hicieron presentes en comparación con la mayoría de aficionados del Manchester City. El equipo andaluz, con experiencia en finales europeas y victorias en ellas, defendió tenazmente, esperando la oportunidad de un error rival para lanzar un contraataque y tomar la delantera en el marcador.
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A pesar de estar en las puertas de su salida del club, Bono tuvo una destacada actuación en la portería, enfrentando a uno de los tridentes más temidos en Europa, encabezado por Haaland. El portero marroquí se mostró a la altura, deteniendo numerosos intentos hasta que un centro de Rodri encontró a Cole Palmer en el segundo palo, quien anotó un poderoso cabezazo para empatar el partido y dar esperanzas al Manchester City.
Tras el empate, el Sevilla experimentó un bajón anímico, pero continuó atacando. En-Nesyri estaba incansable, peleando cada balón en juego, aunque lamentablemente falló en jugadas claras ante un seguro Ederson, quien se mostró confiado en su búsqueda de levantar su primera Supercopa. El partido concluyó 1-1 al final del tiempo reglamentario y en la tanda de penales, solo Gudelj fallaría su disparo desde el punto penal, lo que le costaría el título al equipo español.