Incluso desde su cama de hospital, Mackinlay no dejó de cumplir con sus deberes parlamentarios.
Craig Mackinlay, un parlamentario conservador británico, recibió una ovación de pie en su regreso al Parlamento este miércoles, siete meses después de haber perdido sus manos y piernas debido a una grave sepsis. Este conmovedor momento marcó un hito significativo en su recuperación y subrayó su extraordinaria resiliencia.
En septiembre pasado, Mackinlay fue ingresado de urgencia al hospital tras desarrollar una sepsis, una complicación severa de una infección que puede causar insuficiencia orgánica y, en su caso, llevó a un estado crítico. Mackinlay pasó 16 días en coma inducido, con una probabilidad de supervivencia estimada en apenas un 5%. Durante este período, sus extremidades se volvieron negras y rígidas debido al shock séptico, lo que resultó en la necesidad de amputarlas en diciembre.
Mackinlay describió su regreso al Parlamento como un «día emotivo». Al dirigirse a sus colegas, se disculpó por no seguir el protocolo de vestimenta habitual, usando zapatillas deportivas y sin chaqueta debido a la dificultad de adaptar su vestuario a sus nuevas prótesis. A pesar de estos desafíos, su espíritu y determinación fueron recibidos con gran respeto y admiración.
En una entrevista con la BBC, Mackinlay, de 57 años, compartió detalles sobre su experiencia. Relató cómo una noche de septiembre se acostó temprano pensando que tenía un resfriado común. Sin embargo, su condición empeoró rápidamente y su esposa llamó a los servicios de emergencia. «Media hora después de ingresar al hospital, mi cuerpo se puso azul», recordó, describiendo un síntoma crítico del shock séptico.
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Tras despertar del coma, Mackinlay se enfrentó a la realidad de su nuevo cuerpo. «Lograron salvar mis extremidades hasta los codos y por encima de las rodillas. Así que se podría decir que tengo suerte», afirmó, subrayando su perspectiva positiva a pesar de la severidad de su situación. Desde entonces, ha recibido prótesis para sus piernas y manos, y ha estado trabajando arduamente en su rehabilitación.
Incluso desde su cama de hospital, Mackinlay no dejó de cumplir con sus deberes parlamentarios. Comenzó su reeducación física en febrero, y cinco meses después de su sepsis, dio sus primeros pasos sin asistencia. Su dedicación y compromiso con su trabajo han sido inquebrantables.
Mackinlay se ha convertido en un defensor activo de la concienciación sobre la sepsis, una condición que causa alrededor de 48,000 muertes anuales en el Reino Unido. Su experiencia personal ha añadido una dimensión profundamente humana a esta causa, y planea utilizar su plataforma para promover la educación y la prevención de esta enfermedad devastadora.
El diputado, electo desde 2015, tiene la intención de postularse nuevamente en las elecciones legislativas de este año por su circunscripción en Kent, al sureste de Inglaterra. Su historia de supervivencia y su regreso al Parlamento no solo inspiran a sus colegas y constituyentes, sino que también sirven como un poderoso recordatorio de la importancia de la resiliencia y la fortaleza humana frente a la adversidad.
Craig Mackinlay, quien se describe a sí mismo como el primer «parlamentario biónico» debido a sus prótesis, ha demostrado que incluso en los momentos más oscuros, es posible encontrar la luz y seguir adelante con valentía y determinación.