Con guante de seda en el caso “Los pitufos de Paola Ugaz”
Autor: Uri Ben Schmuel
Como hemos venido exponiendo hace varias semanas, el caso que involucra a la ciudadana peruana Paola Ugaz Cruz en el presunto delito de lavado de activos presenta indicios que estarían abriendo nuevas rutas en la investigación. Lo que empezó como una supuesta red de coordinación para el pitufeo de dinero, ha develado también lo que parecería ser relaciones interpersonales basadas en exigencias y amenazas entre algunos de los implicados. Sin embargo, y a pesar de todas las pruebas que están en manos del mismo Ministerio Público, en los últimos días trascendió que durante algunas de las audiencias que se realizan con los supuestos “pitufos”, los fiscales a cargo de estas no han tomado en cuenta dichas pruebas lo que, según fuentes cercanas a la Fiscalía, está suscitando la sospecha de que se estaría tratando con guantes de seda a algunos de los involucrados.
Por ejemplo, una fuente comentó que durante la audiencia en la que declaró Marco Paz Mansilla, la fiscal especialista Luz Córdova, al momento de referirse a otro de los implicados —Ricardo Marco Antonio Vicent Anderson Campos Ruiz— no usó su nombre completo, por lo que Paz Mansilla no pudo responder si lo conocía o no, ya que no logró identificarlo con el nombre abreviado. Esto, según la fuente citada, sorprendió a varios porque, como indica, fue el propio fiscal José Domingo Pérez quien solicitó incluir a Anderson Campos Ruiz en la investigación y proporcionó el nombre completo. ¿Por qué, entonces, la fiscal Luz Córdova a cargo de tomar declaraciones solo mencionó a “Vicente Campos” y no citó el nombre completo del sospechoso? ¿Por qué no respetan la solicitud del Fiscal Domingo Pérez de que dicha persona sea incluida en el proceso de investigación? Esto, cuando lo contrastamos con fuentes cercanas al IDL, podría deberse a gestiones que estarían realizando los asesores legales de Ugaz dentro de la Fiscalía para excluir a Anderson Campos Ruiz de la investigación, ya que sería uno de los principales coordinadores de la supuesta red. Un dato relevante que abonaría en dicha hipótesis es que se habría suspendido la orden de allanamiento de la vivienda de Anderson Campos Ruiz cuando ya había sido programada por indicación del fiscal José Domingo Pérez. Otra inquietud que se comenta en los pasillos de la Fiscalía es: ¿por qué los sindicados como supuestos “pitufos” son citados como testigos si es que su participación sería más bien la de miembros en la supuesta organización de lavados de activos? ¿Por qué los fiscales no han profundizado en el dato comprobado, por ejemplo, de que tanto Anderson Campos Ruiz, Paz Mansilla y otro incluido en la investigación —Luis Felipe Vega Bermúdez— son compañeros de estudios, estableciéndose así un vínculo previo? ¿Por qué la especialista fiscal Luz Córdova fue tan suave en el interrogatorio que le hizo a Paz Mansilla si es que hay claros indicios de desbalance patrimonial, cuyas pruebas ya están en manos del Ministerio Público, que exigen una investigación a fondo?
Carta Notarial
El pasado 30 de junio, uno de los que debería ser investigado por la Fiscalía en el caso “Los pitufos de Paola Ugaz” —Ricardo Marco Antonio Vicent Anderson Campos Ruiz— envió una carta notarial negando todo lo que hemos venido publicando sobre él y alegando que nunca ha sido investigado por tráfico internacional de drogas ni que tiene negocios de tráficos de terrenos. También negó rotundamente conocer a Paola Ugaz. Del mismo modo, pidió que me rectifique y si no empezaría acciones legales.
Sobre esto, debo dejar constancia que solo soy un columnista y no empleado del diario La Razón, y por ende único y exclusivo responsable del contenido de mis artículos de opinión. Sin embargo, por más que quisiera, no podría rectificarme, pues existen muchas evidencias que indicarían que todo lo señalado hasta el momento es cierto. Por ejemplo, en cuanto a su negativa a reconocer que ha sido investigado por tráfico ilícito de drogas, ya hemos publicado la sentencia del Tribunal Constitucional del año 2012 sobre un hábeas corpus que Anderson Campos Ruiz solicita precisamente en función a un juicio que sostiene por dicho delito que se inició en 1995. ¿Cómo, entonces, puede decir en su carta que aquí “se pretende falsear como todo lo anterior, que en el año 1995, se inició una investigación en mi contra por presunta red de tráfico de drogas, alegremente y sin mediar o reparar que esta noticia periodística pueda afectar gravemente mi imagen personal y la de mi familia”? ¿Qué de “alegre” tiene citar y mostrar una sentencia del Tribunal Constitucional sobre un recurso que él mismo interpuso sobre esa investigación por tráfico ilícito de drogas? Además, tenemos conocimiento que este caso en el que él niega estar involucrado se encuentra actualmente en la 3era Fiscalía Provincial Penal de Lima por el Delito de Contra la Salud Pública – Tráfico Ilícito de Drogas. Además, según información del Ministerio Público sobre Anderson Campos Ruiz, este “no presenta declaraciones de impuestos, no registra aportaciones a Essalud, no es poseedor de bienes inmuebles o vehiculares”, lo que no guardaría correspondencia con su alto nivel de vida. Para cerrar este punto, cabe aclarar que nosotros nunca hemos mencionado que haya sido culpable o no sobre este delito. Solo mencionamos que a partir del año 1995 tiene una investigación abierta, lo que es cierto.
Sobre la mención al posible tráfico de terrenos, aún no tenemos toda la información necesaria como para publicarla con el rigor con el que hasta ahora venimos siguiendo este caso, pero hay ciertos indicios que apuntan a que Anderson Campos Ruiz podría estar involucrado en el tráfico de tierras tanto en el sur de Lima (Punta Negra) como en otros terrenos eriazos que habrían sido adjudicados por el Gobierno Regional de La Libertad en el norte del país. Obviamente, al ser tráfico, las propiedades no están a nombre del posible autor del presunto delito de tráfico de tierras ya que ese tipo de delitos se ejecutan a través de testaferros. Y es esa la línea que se estaría siguiendo para encontrar a los posibles autores de este delito. Según fuentes del Ministerio Público, ya se habría conseguido varias pruebas que pronto estarían incluidas en la carpeta de investigación. Por esto, hasta que nos confirmen que no hay nada turbio, seguiremos informando. Además, como en el caso anterior, nunca hemos afirmado que él sea culpable.
Finalmente, sobre su afirmación de que no conoce a Paola Ugaz y nunca la ha visto, esto se resolverá en el momento en que la misma Fiscalía determine que dicho dato es real. Hasta el momento, las declaraciones de un colaborador y otros indicios adicionales indicarían lo contrario. Y parte de la sospecha de que efectivamente hay (o hubo) una relación entre ambos, está en lo que describimos más arriba: el escandaloso “descuido” de la fiscal auxiliar Luz Córdova de no mencionar el nombre completo del investigado en una audiencia, a pesar de que su superior, el Fiscal José Domingo Pérez, ya había dado la orden escrita y expresa para que se hiciera de esa forma. Parecería que no lo quieren incluir. La pregunta es por qué. ¿Quién está moviendo sus hilos dentro de la Fiscalía para que Anderson Campos Ruiz, pase desapercibido y no sea investigado?
(*) La Dirección y la empresa no se hacen responsables por los artículos firmados.