El logro de este objetivo no será inmediato y exigirá un esfuerzo significativo por parte de ambas partes en el conflicto de Gaza
El viernes pasado, el presidente estadounidense, Joe Biden, reafirmó al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, la importancia de incluir la cuestión de un Estado palestino en las conversaciones para abordar el conflicto entre Palestina e Israel.
John Kirby, uno de los voceros de la Casa Blanca, informó en una conferencia de prensa que Biden había mantenido una conversación telefónica con Netanyahu sobre la posguerra en Gaza. En dicha conversación, se destacó la importancia de que «la creación de dos Estados con la seguridad de Israel garantizada«, sea un componente fundamental en las negociaciones.
La conversación entre ambos líderes ocurrió después de que Netanyahu expresara su oposición el jueves a la creación de un Estado palestino. Estos comentarios generaron controversia, ya que contradicen la posición tradicional mantenida por Estados Unidos.
Según Kirby, durante la llamada, el presidente estadounidense reafirmó su «firme convicción» de que la solución al conflicto palestino-israelí implica la existencia de dos Estados.
Kirby indicó que Biden es consciente de que alcanzar ese objetivo no será inmediato y demandará «un considerable esfuerzo» y «fuerte liderazgo» por parte de ambas partes, tanto de Israel como de Palestina, así como de sus aliados árabes.
«El presidente mantiene su creencia en la promesa y posibilidad de una solución de dos Estados. Reconoce que se necesitará esfuerzo y liderazgo y está dispuesto a aportar su trabajo para lograr eventualmente ese resultado», declaró el portavoz.
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La oposición de Netanyahu
Esta fue la primera conversación telefónica entre ambos líderes en casi un mes. La última vez que se comunicaron fue el 23 de diciembre.
La Casa Blanca afirmó que la llamada no está vinculada a los comentarios de Netanyahu del jueves, en los que expresó su oposición a la creación de un Estado palestino como parte de un posible escenario posconflicto en Gaza.
Netanyahu también rechaza la posibilidad de que la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que administra ciertas áreas de la Cisjordania ocupada, recupere el control de la Franja tras el fin de la ofensiva israelí.
Biden y la Unión Europea (UE) han reafirmado en varias ocasiones su apoyo a la solución de dos Estados desde el comienzo de la guerra en Gaza. Asimismo, han abogado por que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) retome el control de la Franja al finalizar el conflicto, recordando que fue expulsada del enclave cuando Hamás tomó el poder por la fuerza en 2007.
La fecha de inicio de la guerra entre Israel y Hamás es el 7 de octubre, cuando un ataque de Hamás resultó en 1,200 muertos y más de 240 rehenes. En respuesta, el Ejército israelí inició una intensa ofensiva en Gaza, resultando en la muerte de 25,000 personas, incluyendo a muchas mujeres y niños.
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