A pesar de haber sido reinaugurado por la presidenta Dina Boluarte, el laboratorio del Hospital Loayza no está operativo
Los pacientes del Hospital Nacional Arzobispo Loayza enfrentan dificultades adicionales, ya que el laboratorio de emergencia, recientemente reabierto por el gobierno de Dina Boluarte, no está operativo. Esto afecta a la población que recibe atención en este hospital.
Los pacientes que acuden con problemas de salud a la sala de emergencias también se enfrentan a la dificultad de obtener los análisis necesarios, a pesar de que el laboratorio fue inaugurado en 2019 y recientemente reabierto en enero de 2024. Incluso se capacitó a personal especializado para este propósito.
De acuerdo con un informe de los medios, los ciudadanos que esperan recibir los resultados de los análisis en el hospital Loayza deben dirigirse a otro laboratorio ubicado en la otra parte del extenso hospital.
Sin embargo, este laboratorio solo está abierto durante el horario de oficina. Esto significa que si surge una emergencia durante la noche u otras horas, no podrán obtener los resultados en ese momento.
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Por lo tanto, los pacientes que acuden a la Unidad de Emergencia del hospital deben dirigirse a un centro privado para someterse a varios análisis. Este centro incluso opera dentro del mismo hospital debido a un acuerdo, pero los pacientes afirman que esto implica un costo adicional, a pesar de que no se paga alquiler.
En la actualidad, en lugar de procesar todos los análisis médicos de los pacientes del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, el área recientemente reinaugurada está siendo utilizada como un depósito para materiales y cartones. «Nos solicitaron análisis para mi esposa y llevamos esperando varias horas«, expresó un ciudadano.
Wilfredo Castillo, un paciente de 78 años, abandonó su cama en uno de los pabellones del hospital porque el laboratorio no puede realizarle las pruebas.
También, una pareja de personas mayores esperaba por análisis, ya que uno de ellos padece de cálculos, pero tendrán que esperar hasta julio. Además, otra paciente, que se encuentra en una silla de ruedas debido a la diabetes que le hizo perder una pierna, lamentó entre sollozos que su hija ha fallecido, lo que le impide costear los gastos de los análisis en el laboratorio privado.