El CO2, gas principal del efecto invernadero, ha disminuido en tiempo récord durante este 2020.
El efecto invernadero por medio de la contaminación ambiental y la emisión del CO2 han sido el detonante de una preocupación mundial en nuestra época. Sin embargo, la llegada de todas las restricciones debido a la pandemia, trajo consigo la disminución récord del 7%, según el balance anual del Proyecto Global de carbono (GCP) publicado el viernes. Este informe analiza las emisiones anuales de CO2 de origen fósil y su persistencia en la atmósfera, responsables del cambio climático y sus consecuencias catastróficas.
La disminución del CO2 relacionada con la crisis del coronavirus debería ser de corta duración. En China, «las emisiones volvieron a tener en abril el nivel anterior», indicó Philippe Ciais. «Se puede esperar que haya un aumento en 2021», agregó. «Es una disminución temporal», añade. «El medio para atenuar el cambio climático no es cesar las actividades sino acelerar la transición hacia energías de bajo carbono», insiste el investigador.
Además, la disminución de las emisiones de CO2 no lleva a una reducción de la concentración de CO2 en la atmósfera, señala. Se multiplicó por cerca de 1,5 entre 1750 y 2019 para alcanzar 410 ppm. «El gran asunto es saber si las inversiones relacionadas con la recuperación económica posibilitará crear una verdadero aumento en las energías de bajo carbono y una reducción visible de las emisiones», indicó Philippe Ciais.