Periodista Sánchez Serra cuestiona a arzobispo
Las declaraciones del arzobispo de Lima, Carlos Castillo, en Radio Programas del Perú dejan la impresión de que la querella legal contra la periodista Paola Ugaz, trabada por el ciudadano Alberto Gómez de la Torre, sería una forma de persecución del Sodalicio de Vida Cristiana, donde además señala que detrás de la denuncia estaría operando dicha comunidad cristiana, opinó Ricardo Sánchez Serra en su columna de La Abeja.
Sostiene que el prelado de la Iglesia Católica no tiene ninguna calificación para opinar sobre un proceso judicial. La materia de la querella no es objeto del cuidado pastoral de un obispo y se pregunta ¿Por qué monseñor Castillo utiliza un espacio radial, concedido en su calidad de obispo de una feligresía católica, para ocuparse de un asunto que nada tiene que ver con temas de fe o de costumbres cristianas?
Sánchez Serra establece un análisis sobre las declaraciones del obispo y el contenido de la carta abierta que Gómez de la Torre envió como respuesta al mencionado Prelado, por lo que infiere que Monseñor en base a conjeturas da por sentado que la querella tiene relación directa con el Sodalicio de Vida Cristiana, y no se preocupó por conocer de manera previa la posición de Gómez de la Torre y el contenido de su denuncia.
PARCIALIZADO
Sánchez Serra sostuvo que el reportaje de la cadena Al Jazzera en cuestión se basó en testimonios de personas muy cuestionadas, con prontuarios delincuenciales abultados, y que a la fecha algunas de ellas están sentenciadas por difamación, precisamente por lo dicho en ese reportaje.
“Como se ve, no es un asunto fácil. Visto esto, cabe preguntarse si monseñor Castillo, antes de hacer sus declaraciones, se informó adecuadamente. En un caso como este, lo prudente y proporcional, habría sido recabar información de ambas partes antes de emitir una opinión, y más aún una opinión tajante”, afirmó.
Opinó que es algo difícil de explicar a santo de qué el Arzobispo de Lima tiene que opinar sobre este hecho y por qué toma partido por una periodista como Paola Ugaz, sobre la que pesan investigaciones por corrupción, que nadie se toma la molestia de esclarecer.
Dijo que el obispo al opinar sobre un hecho del ámbito civil, tiene que hacerse cargo de sus opiniones y eso, en buena cuenta, parece ser lo que Gómez de la Torre le pide en la carta que le dirige. “¿Qué interés puede tener para opinar sobre un asunto cuyos detalles, además, parece desconocer? ¿Por qué cierra filas con una de las partes? ¿Será acaso que la periodista tiene alguna información, ante la cual el obispo se siente vulnerable?”, puntualizó el columnista.