El inglés Lewis Hamilton se proclamó hexacampeón del Formula 1, tras acabar segundo en el Gran Premio de Estados Unidos, que se disputó ayer en el Circuito de las Américas de Austin de Texas, Estados Unidos.
El británico completó las 56 vueltas de la carrera con un tiempo de 1:40.503. Su compañero de equipo, el finlandés Valtteri Bottas (1:40.351), fue el ganador de la prueba, y lograron un nuevo doblete para la escudería, mientras que el holandés Max Verstappen los acompañó en el podio y el monegasco Charles Leclerc acabó cuarto.
El corredor, que había ganado en los Grandes Premios de Bahréin, China, España, Mónaco, Canadá, Francia, Inglaterra, Hungría, Rusia, México, llegó a Austin con la necesidad de conseguir cuatro puntos para ser campeón y al quedar segundo logró 25 unidades. Hamilton aseguró el título cuando aún faltan otras dos carreras por disputarse dentro del calendario oficial de la Formula 1 para el 2019, los Grandes Premios de Brasil y Emiratos Árabes.
Con este logro el piloto de 34 años superó al argentino Juan Manuel Fangio, campeón en cinco oportunidades (1951, 1954, 1955, 1956 y 1957) al sumar su sexta corona. Delante de él queda solamente el ex piloto alemán Michael Schumacher, quien ostenta siete campeonatos (1994, 1995, 2000, 2001, 2002, 2003 y 2004).
Hamilton, que vive su vida fuera de los circuitos, confiesa que pelea por mejorar, trata de ser vegano, busca encontrarse a sí mismo. Como hacemos todos en definitiva, tratar de ser mejores, más allá de los tatuajes y los peinados exóticos.
Tal vez el secreto para Hamilton hombre sea mirar a sus colegas pilotos y a si mismo, recordar cómo él se reconcilió con Vettel y Alonso, ver cómo Ayrton y Prost terminaron abrazados en un podio, y comenzar a recorrer de esa manera su propio camino. A esta altura lo merece.