Enrique Ghersi afirma que la izquierda comete un grave error al marcar distancia con ex alcaldesa. “Sería una táctica política, porque quieren pasar inadvertidos y estar lejos para no verse comprometidos. pero yo creo que la verdad terminará imponiéndose” asegura.
Por: Roberto Sánchez R. / Para el constitucionalista Enrique Ghersi la izquierda comete un craso error de guardar silencio y marcar distancia con respecto a la decisión del
Poder Judicial de cambiar la prisión preventiva por la figura de arresto domiciliario, para Susana Villarán por razones estrictamente humanitarias y su vulnerabilidad ante la pandemia por el COVID-19, decisión que ha propiciado incluso rabietas del Ministerio Público.
¿Está de acuerdo con la decisión de la primera sala penal de apelaciones especializada en delitos de corrupción de cesar la prisión preventiva de Susana Villarán y sustituirla por la medida de detención domiciliaria?
La decisión del Poder Judicial es correcta. Lamentablemente en el Perú el sistema carcelario no les ofrece a los detenidos, ninguna seguridad sanitaria. Y estamos frente a una pandemia acreditada. Además la señora Villarán no solo por su edad, sino porque tiene una enfermedad autoinmune muy delicada, llamada lupus y se encuentra considerada persona de alto riesgo. Entonces, es muy razonable que siguiendo los criterios de derecho humanitario, el Poder Judicial haya decidido cesar la prisión preventiva contra la señora Villarán y reemplazarla por arresto domiciliario que responde a razones humanitarias y de protección procesal a la investigación judicial que se sigue contra ella.
¿La Constitución Política habría primado para la defensa de la persona humana y por razones humanitarias han decidido variar la medida por una detención domiciliaria?
La decisión es absolutamente razonable y, por lo tanto, la especie de rabieta que le ha dado al Ministerio Publico no se justifica, porque tanto en el caso de la señora Villarán como el de otras personas es justificable ante el posible contagio del COVID19. El Poder Judicial está ordenando su detención domiciliaria, incluido el caso de la señora Keiko que no es por razones de salud, sino que han revocado el mandato de detención. Me parece que
el Poder Judicial actúa tomando en consideración el derecho humanitario, porque la Constitución peruana empieza a decirnos que la persona humana es la base y el centro de todo el sistema jurídico.
¿La decisión se da para que el proceso judicial en investigación preparatoria no se trunque ante un eventual deceso de la señora Villarán?
En efecto, esta decisión se justifica, porque usted sabe que la muerte pone fin al proceso de investigación preparatoria. Entonces, si lo que se quiere es conseguir una mejor manera de investigar el caso, es importante asegurar la integridad de la persona investigada. La decisión, además, debería ser un precedente para que se aplique en otros casos, donde el Estado no pueda asegurar la vida a las personas, tratándose de delitos cancelables, donde en el caso de la señora Villarán se justifica por su estado de salud preexistente.
¿La sorprendente falta de apoyo de sus aliados políticos de izquierda daría la impresión que no serían pocos los implicados en la organización criminal que ella supuestamente dirigió?
La izquierda ha puesto a la señora Villarán en condición de apestada, porque quiere ahora hacer un deslinde frente a las posibles responsabilidades, no solamente judiciales sino también políticas, porque no quieren ser involucrados en el escándalo de corrupción que hubo en el municipio, en el tiempo de la alcaldía de la señora Villarán. Sería una táctica política, porque quieren pasar inadvertidos y estar lejos para no verse comprometidos. Pero yo creo que la verdad terminará imponiéndose.
¿Considera entonces que los ex aliados de la ex alcaldesa deberían admitir que trabajaron con ella?
Hay mucha gente de la izquierda que claramente formó parte del “Villaranismo”, y no nos olvidemos que la señora Marisa Glave fue por ejemplo, prominente miembro del Consejo Municipal. La señora Indira Huilca ex regidora que luego llegó a ser congresista. No sé si
la señora Paola Ugaz, como periodista tendría igualmente que responder cargos como otros ex miembros de la administración edil. Todos los que sirven al Estado deben asumir su responsabilidad con la cosa pública. Me parece grave error guardar silencio, porque al final todo terminará conociéndose. Políticamente es más rentable para ellos (los izquierdistas) hablar, pues las elecciones generales están casi encima.
¿El hecho que ciertos miembros de su círculo íntimo le hayan dado la espalda y, marcando distancia, serían indicios de su vinculación con la asociación ilícita que Villarán habría dirigido?
Es una hipótesis posible. Debemos tomar en consideración un hecho muy importante que es que tampoco la atacan a la señora Villarán. Entonces, habida cuenta de que en el Ministerio Publico y en el Poder Judicial existe presencia mayoritaria de magistrados de izquierda, donde la influencia de IDL y de la izquierda es muy grande, poco debemos descartar el hecho de no atacarla directa o indirectamente implica un respaldo implícito o tácito. Susana Villarán fue un personaje político que insurgió con fuerza. Llevó a la izquierda al triunfo. Ganó la elección. Representó legítimamente los intereses de la izquierda y no puede hablarse de lastre político. La izquierda debe ser autocrítica. No puede pretender desligarse de eso.