Madonna sorprendió a sus fans en su último concierto celebrado en la playa de Copacabana
La compositora de «Like a virgin» reunió este sábado 4 de mayo cerca de 2 millones de personas en Río de Janeiro, en lo que fue el concierto más grande en la historia para una artista femenina. El escenario se ubicó en la playa de Copacabana, lugar donde la Reina del Pop dio por terminado su The Celebration Tour, gira que homenajeó los 40 años de su exitosa trayectoria musical.
Aunque el concierto se desarrollo bien hubieron algunos percances que el publico noto y manifestaron sus molestias por redes sociales, uno de esos factores negativos fue la calidad del sonido durante el concierto generó insatisfacción entre algunos asistentes por su bajo volumen, provocando que muchos de ellos se desplazaran hacia los laterales, mientras que otros optaron por abandonar el evento. En redes sociales, lo que conllevo a una pequeña controversia entre un grupo que señalaba estas deficiencias y otro que no considero esto como un problema.
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Pero en unos de los momentos más destacables, Madonna rindió homenaje a los artistas perjudicados del VIH durante la interpretación de «Live to Tell». En pantalla gigante y en blanco y negro, fotografías de celebridades fallecidas a causa de esta enfermedad.
Pero sin duda alguna el momento que se pude decir que fue el más emotivo fue cuando la cantante le rindió tributo a Michael Jackson, Madonna incorporó un espectáculo de sombras en los últimos minutos del concierto, reviviendo la silueta del Rey del Pop para unirla con la suya, mientras sonaba una mezcla de «Billie Jean» con el instrumental de «Like a Virgin» y ambas figuras bailaban juntas.
El concierto fue un conjunto de emociones, Madonna bebió cerveza, interactuó con sus fans y compartió el escenario con la drag queen Monét X Change y los artistas brasileños Anitta y Pabllo Vittar.
