Con esta adquisición, Microsoft se quedará a cargo de populares juegos como ‘World of Warcraft’ y ‘Call of Duty’
Dos semanas desde que empezó el 2022 y Microsoft ya realiza su jugada más fuerte de este año tras realizar la compra de Activision Blizzard. Anteriormente ya habían realizado la compra de la plataforma Bethesda por 7 millones y medio de dólares, la empresa decidió comprar por más de 60 millones de dólares por Activision Blizzard y de esta manera quedarse con franquicias conocidas en este mundo como ‘Call Of Duty’, ‘World Of Warcraft’, ‘Diablo’, entre otras más. De acuerdo a la compañía, «esta adquisición acelerará el crecimiento del negocio de juegos de Microsoft en móviles, PC, consolas y en la nube, y proporcionará bloques de construcción para el metaverso«.
La transacción va a ser clara y directa: 95 dólares por acción y totalmente en efecto. Así pues, el monto total asciende a 68.700 millones de dólares. Una barbaridad de cifra para un estudio que, curiosamente, no pasa precisamente por su mejor momento. Según señalan desde Microsoft, cuando se complete la transacción Microsoft será «la tercera empresa de videojuegos más grande del mundo por ingresos», solo por detrás de Sony y Tencent.
El propio Phil Spencer, máximo responsable de Microsoft Gaming, afirmó hace un par de meses encontrarse «perturbado y profundamente preocupado por los horribles eventos y acciones» que estaban teniendo lugar Activision. También dijo que Xbox estaba «evaluando todos los aspectos de nuestra relación con Activision Blizzard y haciendo ajustes proactivos en curso». Lo que nadie se esperaba es que esos «ajustes» fuesen a desembocar en la compra del estudio.
Spencer agregó que: «Como empresa, Microsoft está comprometida con nuestro camino hacia la inclusión en todos los aspectos del juego, tanto entre los empleados como entre los jugadores. Valoramos profundamente las culturas individuales de los estudios. También creemos que el éxito creativo y la autonomía van de la mano con el tratamiento de cada persona con dignidad y respeto. Este es el compromiso de todos los equipos y de todos los directivos. Estamos deseando extender nuestra cultura de inclusión proactiva a los grandes equipos de Activision Blizzard».
En cualquier caso, la transacción está sujeta a las condiciones de cierre habituales, a la revisión regulatoria pertinente y a la aprobación de la junta de accionistas de Activision Blizzard. Se espera que la operación se cierre en el año fiscal 2023 (que termina en junio de 2023), así que habrá que esperar hasta entonces. Mientras tanto, ambas empresas seguirán funcionando de forma independiente.