El ministro del Interior, Víctor Torres, confirmó que el policía que abatió a un delincuente en San Martín de Porres no será encarcelado
El ministro del Interior, Víctor Torres, aseguró que el efectivo de la Policía Nacional involucrado en la acción en la que abatió a un delincuente en San Martín de Porres (SMP) en defensa propia no enfrentará prisión.
Durante una conferencia de prensa, el recién nombrado titular del Mininter presentó los resultados de las operaciones policiales en los distritos bajo estado de emergencia. Asimismo, expresó el respaldo de su sector al suboficial Daniel Quispe, quien se vio obligado a usar su arma de fuego para repeler un ataque el pasado viernes, 24 de noviembre.
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«No permitiremos que nuestro personal policial, actuando conforme a la ley, sea encarcelado, ya que eso genera intranquilidad e inseguridad. El suboficial Quispe no será enviado a prisión ni sufrirá detención preventiva», afirmó inicialmente Torres.
El ministro argumentó que no es aceptable que se haya intentado detener al mencionado agente policial, haciendo referencia a un incidente similar en Chimbote, donde otro policía disparó contra dos delincuentes en circunstancias idénticas y no fue sancionado porque actuó dentro de los límites legales.
«Continuamos trabajando con firmeza para proporcionar tranquilidad a nuestro país, para que la población confíe en su Policía Nacional y en este gobierno que está atento para que podamos llevar a cabo nuestras actividades con normalidad», añadió.
Finalmente, Torres Falcón aseguró que están velando por la tranquilidad del policía involucrado y subrayó la necesidad de uniformidad de procedimientos en las entidades públicas encargadas de administrar justicia.
«Estamos cuidando su bienestar, como es debido», concluyó.
En relación con los eventos, el incidente tuvo lugar a las 6 de la mañana del pasado viernes 24 de noviembre en la avenida San Diego de Alcalá, donde el miembro de las Águilas Negras fue interceptado por dos delincuentes en una moto lineal, quienes intentaron robarle sus pertenencias, incluso amenazándolo con un arma de fuego. Según el comandante Luigi Villafuerte, jefe de la División de Emergencias, la actuación del agente policial se enmarcaría en un caso de legítima defensa, respetando todos los protocolos y, sobre todo, la preservación de la vida humana.
