Opina el constitucionalista Natale Amprimo
En declaraciones al diario La Razón, el abogado Natale Amprimo señaló que los recientes cambios ministeriales realizados por la presidenta Dina Boluarte son positivos como, por ejemplo, el de la cartera de Economía y Finanzas que ahora es dirigida por José Arista. Sin embargo, con respecto al jefe de la PCM, Alberto Otárola indicó que solo sirve para “hacer que el tiempo corra para llegar hasta el 2026”.
¿Qué opina usted de los cambios que ha hecho la presidenta Dina Boluarte en los ministerios de Energía y Minas, Economía y Finanzas, Defensa y Ambiente?
Esos son los que se deben hacer, pero por lo menos en el sector Energía y Minas y Economía, creo que se han considerado dos personas que tienen trayectoria en esos rubros. El señor Arista es un excelente técnico y tiene toda una trayectoria no solamente en el Ministerio de Economía, sino también en el Banco Central de Reserva, en la SUNAT, e inclusive en la SAT, cuando trabajó en la gestión de Alberto Andrade. O sea, es un técnico muy bueno, y es una persona que yo creo siempre se ha considerado que es absolutamente honesta y conoce el tema, no es un improvisado.
Pero ¿por qué la señora Boluarte hasta ahora no cambia a Alberto Otarola en la PCM? ¿Acaso es tan bueno como premier?
Mire, para comparar, para decir si es bueno o no es malo, hay que compararlo con algo. Obviamente, diríamos que hay que ver qué es lo que haya a disposición o a la mano. Creo que todo en la política genera un desgaste, evidentemente, pero hay que ver cuáles son las políticas públicas que se quieren implementar. Si lo que quiere es simplemente hacer que el tiempo corra para llegar hasta el 2026, me parece que el señor Otárola está en ese perfil.
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Con respecto a la gran cantidad de partidos políticos, que se proyecta que sean 35 los que podrían estar habilitados para participar en las elecciones generales en el 2026. ¿A qué se debe la atomización del sistema de partidos políticos del Perú?
Que simplemente la gente no quiere participar en los partidos políticos. En consecuencia, se adhieren o suscriben un planillón o tal, en base a una serie de otros tipos de consideraciones, pero no por un compromiso ideológico o de criterios determinados. Hoy en día los partidos no tienen líderes, no tienen pastores que guien a los rebaños, tienen simplemente empresarios y mercenarios que simplemente se acomodan a lo que las encuestas puedan decir y punto. Entonces, esas son las consecuencias de las reformas, entre comillas, políticas que se impulsaron y las consecuencias de haber irresponsablemente demolido el sistema de partidos políticos del Perú. Nos hemos acostumbrado a ver a personas como si fueran una suerte de semi-dioses. ¿Usted ha olvidado cómo se veía al señor Martín Vizcarra? Se le llevaba a las alturas y se le consideraba que era casi una suerte de Dios. Hubo una periodista que inclusive dijo que ella desearía que Vizcarra hubiera sido su papá. Bueno, y eso no es una cosa política únicamente del Perú. Mire lo que pasó en Alemania, un pueblo culto como el alemán cayó frente a personas como Adolf Hitler o tiene usted otros países que son peores. Entonces, somos pueblos que muchas veces se dejan seducir por personas inescrupulosas, sin valores éticos y cívicos y que con el mayor desparpajo mienten.
¿Y porque la ciudadanía sigue creyendo en esos personajes?
La gente quiere creer y hay también que señalar que ha habido mucha prensa que ha impulsado a sus personajes. Que hoy día vemos que todo ha sido una suerte pues de intercambio de prebendas y de intereses porque aquí en el Perú se habla mucho de periodismo de investigación. Pero aquí no hay ningún periodismo de investigación, aquí lo que hay simplemente es filtraciones de instituciones que deberían guardar reserva y actuar con absoluto apego a la ley y de manera reservada, que simplemente entregan documentos con el afán de generar favores y campañas en favor de ciertas líneas que ellos quieren implementar. Hay que decir las cosas como son y no hemos aprendido la lección.