Entre las aves que fueron acogidas en el Parque de las Leyendas, tras el derrame de petróleo, se encuentran el guanay y el pelícano peruano.
La mitad de las aves que fueron trasladadas hasta el Parque de las Leyendas luego de la catástrofe ambiental generada por el derrame de petróleo en el mar de Ventanilla, perecieron. Esto fue confirmado, el pasado 15 de enero, por la bióloga Giovanna Yépez, subgerente del zoológico.
“A la fecha hemos recibido un poco más de 150 aves, de las cuales estamos manteniendo un poco más de la mitad en tratamiento”, porque las demás fallecieron, señaló Yépez a AFP.
Solo algunas de ellas se salvaron de una muerte segura. Por ahora, las aves que sobrevivieron están en observación en el zoológico. Dentro de este grupo de aves se encuentran once pingüinos de Humboldt, que vienen rehabilitándose mediante la alimentación e hidratación. También a través de baños especiales.
“Desde que llegaron (los pingüinos) para nosotros fue una gran preocupación, ya que es una especie muy amenazada” que está en peligro de extinción, manifestó la bióloga.
Es importante mencionar que el habitad natural de los pingüinos de Humboldt son las colonias en las costas de Perú y Chile. Esto se debe a que sus aguas frías son ricas en nutrientes por la corriente de Humboldt, que avanza hacia el norte desde la Antártida. “Es una especie muy recia, han aguantado el problema del hidrocarburo”, agregó Yépez.