El nuevo Directorio de la empresa estatal de hidrocarburos, Petróleos del Perú (Petroperú), informó a la opinión pública que le solicitó a su Junta General de Accionistas (JGA) la posibilidad de privatizar la institución con el fin de contar con una espalda financiera más amplia.
A través de un comunicado institucional, la entidad señaló que requiere alrededor de 2 mil 200 millones de dólares adicionales para recuperar la estabilidad financiera; sin embargo, alertó que resultaría irresponsable solicitar tal cantidad al Estado peruano debido a los “usuales apetitos políticos”, ya que “nada asegura que la empresa no retorne en el futuro cercano a solicitar más apoyo estatal, en desmedro de la caja fiscal y el bolsillo de los contribuyentes peruanos”.
Tal postura generó la respuesta de las autoridades nacionales, quienes se manifestaron tanto a favor como en contra de la pretención de la empresa. Entre ellos, el congresista de Perú Libre, Flavio Cruz, señaló en Canal N que tal acción es una muestra absoluta de “antiperuanidad”, pues implicaría la venta de la entidad adscrita al Ministerio de Energía y Minas (Minem) a “la dictadura empresarial que gobierna al país”.
Tal y como expresó la institución en su comunicado, las condiciones financieras que requiere la empresa son tan anchas que afectaría a su accionista; es decir, al Estado peruano y, por consecuencia, tomaría los recursos de los ciudadanos. Como mencionado anteriormente, los cálculos de la empresa señalan un financiamiento adicional de 2 mil 200 millones de dólares.
“En las actuales circunstancias de un Petroperú con gobernanza y gestión empresarial expuesta a los usuales apetitos políticos, sería irresponsable y un acto de inmoralidad solicitar mayor financiamiento del Estado, ya que nada asegura que la empresa no retorne en el futuro cercano a solicitar más apoyo estatal, en desmedro de la caja fiscal y el bolsillo de los contribuyentes peruanos”, señaló la empresa del Estado.