El burgomaestre de Lima se comprometió con las Unidades de Flagrancia, aunque todavía no se concreta reunión.
“Estamos buscando el apoyo del alcalde de Lima, quien nos ha ofrecido su apoyo y con quien tenemos pendiente una reunión. El principal problema es el local e infraestructura para implementar Unidades de Flagrancia”, indicó Arévalo.
El titular del Poder Judicial detalló la importancia de las Unidades de Flagrancia, que ubican en una sola sede a la Fiscalía de la Nación, al Poder Judicial, la Defensoría del Pueblo y la Policía Nacional del Perú. Esto también haría posible el uso de tecnologías para que los procesos de flagrancias se avancen más célere.
Según la normativa, los delitos que pueden ser tramitados en estos módulos son: Hurto simple y agravado, lesiones leves por violencia familiar, conducción en estado de ebriedad o drogadicción, agresiones contra mujeres e integrantes del grupo familiar, desobediencia o resistencia a la autoridad, robo agravados, entre otros.
“Las Unidades de Flagrancia nos permiten sentenciar en un máximo de 72 horas porque en estos módulos además se trabaja mucho con tecnologías y el uso de videos. Así, es más fácil que la Fiscalía pueda ejercer la acción penal, el procesado reconozca sus delitos y los jueces dicten sentencias”, argumentó.
Sin embargo, Arévalo explicó que aunque los procesos por flagrancia delictiva en estas unidades sean más rápidos, se garantiza en estos el debido proceso y el derecho de defensa para los implicados.
Unidades de Flagrancia en proyecto y en uso
Además, la máxima autoridad del Poder Judicial informó que el lunes sostuvo una reunión con la presidente de la Corte del Callao, Teresa Soto, para proyectar la creación de la Unidad de Flagrancia en dicha provincia constitucional, la cual servirá para reforzar las acciones interinstitucionales contra la inseguridad ciudadana.
“Estamos trabajando en eso con la presidenta de la Corte del Callao. Esto demora un poco sobre todo por aspectos de infraestructura pero estamos trabajando”, precisó.
Cabe señalar que a la fecha, vienen funcionando dos unidades de flagrancia delictiva, una en el distrito de El Porvenir, en Trujillo; y otra en el distrito de Villa El Salvador, en Lima, con resultados óptimos. Esta última, en cuatro meses, atendió 72 denuncias, de las cuales 51 ya tuvieron sentencia en menos de 72 horas.