«Recordar es vivir». Circula una foto «viral» (de la época del desbordamiento social en Colombia, cuando el expresidente Duque propuso una reforma tributaria). Aparecen Gustavo Petro y Gustavo Bolívar, con una pancarta, que dice: NO A LA REFORMA TRIBUTARIA.
1) No negamos, que el Presidente Petro, tiene buenas intenciones. El camino nos parece inadecuado: Petro y su ministro de Hacienda incrementarían el Impuesto al Valor Agregado o IVA, a gaseosas, Néctares, Bebidas con Colorantes y Saborizantes, al Ponqué Ramo, a las Papas Fritas y a otras chucherías o golosinas. Su intención es positiva: Quieren desestimular el consumir la llamada «Comida Chatarra» o de baja calidad, obviamente para beneficio de la dieta, especialmente infantil, evitando la obesidad y otros aspectos que afectan lentamente, la salud de los colombianos.
El Gobierno podría, sin afectar súbitamente o bruscamente la red de producción-distribución de las industrias que producen ese tipo de alimentos, etc., comenzar una «batalla» pedagógica: Visitando colegios, hablándole del tema a los estudiantes, colocando publicidad en la media, para que llegue esta información, lo más pronto posible a los hogares colombianos.
Por otra parte, las familias con recursos, no se afectarían por el mayor valor de esos productos. No quiero ser sarcástico ni peyorativo, pero quiero llegar a este punto que me parece importante destacar: Los «ricos», no solamente tienen un poder económico, sino también, por lo general, un poder cultural: Han podido estudiar. Y al otro extremo, tenemos a los «pobres», que por lo general, son pobres en todo: Son pobres económicamente y pobres culturalmente. ¿Y de quién es la culpa o responsabilidad ? Del Estado, que (vuelve y juega el concepto) durante 200 años no ha podido darle educación a los ciudadanos, que hemos llamado población desamparada.
Toda la responsabilidad de la corrupción es del Estado, que -de una u otra manera o diferentes maneras, la ha permitido.
Una familia de pocos recursos, económicos y culturales, a duras penas tiene dinero para comprar esos productos y a duras penas, tiene una riqueza cultural para entender técnicamente la cuestión del por qué, la comida chatarra no es conveniente para la SALUD de la familia. Así que si suben el precio de esa comida, -exagerando-, no va a tener dinero con qué comer ni con qué comprar. La tienda bajará ventas, comprará menos al distribuidor/productor ¿Y entonces ?
Debemos entender, lamentablemente, que «los pobres», son pobres, no solamente en dinero, sino también, en cultura.
Todo los estúpidos sabihondos como Carlitos Marx o Lenin y otros más, le echan «el muerto» de los problemas sociales a los ricos. O sea, la parte de la sociedad que además de bienes y recursos económicos posee una «fortuna» cultural. A diferencia del otro extremo que tiene pobreza económica y cultural.
Cuando el ser humano no alimenta el alma, cuando no alimenta su sabiduría, esa alma no crece, no se desarrolla, se enferma y «muere». Un corrupto, un ladrón, un violador, un asesino, un narcotraficante, un guerrillero, etc. son seres que metafóricamente, están enfermos, son seres «des-almados».
Por ello, otra de las urgencias supremas que debería acometer el Gobierno de Petro, que bien piensa en la población desamparada, es acelerar un censo, que le entregue al país y al mundo, (¿Por qué no?), cuántas escuelas o colegios hacen falta, para construir y sentirnos satisfechos de al menos una misión cumplida. No dejar a la Población, que «muera» en vida, por falta de educación, convirtiéndose con el paso del tiempo en asesinos, feminicidas, corruptos, guerrilleros, chanchulleros, ladrones y asesinos por celulares, etc.
Pero no, el Presidente Petro, sigue con el corre-corre, de verse a toda costa, con el dictador Maduro. ¿Por qué salieron millones de venezolanos de su país? Falta que Maduro hubiera utilizado la misma fórmula de Castro con los Estados Unidos. Se desembarazó de presos, «dejó salir» a ladrones y prostitutas y a todo el lumpen cubano. Es probable que Maduro hubiera hecho igual. ¿Por qué, los 6 millones de venezolanos que pululan por las ciudades Latinoamericanas, ¿Por qué entonces salieron del Paraíso Venezolano?
¿Por qué?
(*) Miembro A.I.E.L.C.