por: Arturo Bobbio C. / PETROPERÚ Y LA CRISIS ENERGÉTICA

En 1969 después de la nacionalización de petroleras de talla internacional como la International Petroleum Company, Standard Oil de New Jersey entre otras, nace PetroPerú bajo el sueño del general Juan Velasco Alvarado de volver a nuestro país en el “Texas de Los Andes”, hoy luego de su época dorada y más de medio siglo desde su creación, vemos en todos los medios de comunicación voces que llaman a que se privatice, evidenciando su crisis económica e institucional, por eso considere justo y necesario hacer un análisis de su situación, Petro Perú paso de ser competitivo, eficiente y rentable llegando a producir 68 mil barriles por día en 1986, a convertirse en una institución inviable, ineficiente y deficitaria en el año 1991obteniendo utilidades operativas y netas negativas debido a la indiscriminada política de subsidios que se dieron para evitar las constantes subidas de los combustibles, a pesar que el déficit se originó debido a interferencias políticas, el año 1992 se toma erróneamente la decisión de dar inicio a su privatización fragmentada, desmembrando sus unidades operativas como las refinerías de la Pampilla y Pucallpa, lubricantes Petrolube, Solgas, Grifos Petro Perú, Petromar, entre otras, curiosamente quienes adquirieron dichas empresas, las vendieron a transnacionales a los pocos años por el doble y hasta diez veces el valor  pagado, esto demuestra el tremendo error cometido, incluso sin esas unidades productivas el año 1994 logra recuperarse generando 259 millones de dólares de excedentes económicos, durante todos estos años y dependiendo del nivel de injerencia política antitécnica de los gobiernos de turno, Petro Perú ha tenido periodos buenos y malos, agudizándose su situación en los últimos quince años, en la actualidad esto origino que el Ministerio de economía y finanzas acuda a su rescate con más de 700 millones de dólares que al día de hoy no se sabe cómo pagará, más aún cuando ha tenido pérdidas de más de 60 millones de dólares entre enero y setiembre de este año, siendo una entidad monotemática, demasiado robusta, donde los puestos parecen heredarse de padres a hijos y hasta nietos, nombrándose con jugosos sueldos, todo esto sin contar los innumerables problemas generados a diversas comunidades selváticas por sus oleoductos anti técnicamente manejados, hoy en medio de esta crisis institucional donde ni siquiera logran nombrar un presidente del directorio, urge un cambio de visión y core-bussiness, debemos aspirar a que PetroPerú pase de ser el lastre que necesita constantes rescates financieros a una empresa innovadora y con prestigio internacional, esto se logrará haciendo una reingeniería de su capital humano, buscando convertirla en el buque insignia, generadora y promotora de las energías del Perú, es decir cambiar su visión monotemática petrolera y ampliarla para incentivar, promover y asociarse en proyectos de energías renovables como las que pueden generarse a través del litio, el viento, el agua, los rayos del sol, el calor de nuestro volcanes, las fuerza de nuestros mares, entre otras, no olvidemos que Chile ya es el abanderado en América Latina en el Hidrógeno Verde, teniendo menos territorio y menos recursos hídricos que nosotros, Petro Perú debe ser el medio para llegar a ser un país autosuficiente en energía, con energías renovables y limpias, por ello urge su relanzamiento y todos debemos apoyarlo.