La situación económica y social en Latinoamérica alcanza niveles críticos, caracterizados por la pobreza persistente y la creciente inseguridad ciudadana. Frente a esta realidad, Juan Fernando Correa, empresario comprometido con el cambio y la revitalización del Perú propone, «Creer para Volver a Crecer», no solo para señalar los problemas fundamentales, sino que también llama a los empresarios a asumir un papel activo en la transformación de nuestras naciones.
En el contexto peruano, la falta de voluntad política para abordar la pobreza y la inseguridad ciudadana por parte del gobierno ha llevado a un estancamiento económico preocupante. Correa destaca la necesidad de que los empresarios reconozcan su responsabilidad en este escenario y se involucren activamente en la reactivación del país. Su llamado es claro: «culpar al Estado y quedarse de brazos cruzados no es una opción viable».
El lema del último CADE «Volver a Creer para Volver a Crecer» planteó desafíos concretos a los empresarios. El primer paso es reconocer la desconexión existente entre el mundo empresarial y la población, especialmente los más necesitados. La percepción negativa hacia el empresariado como indolente y distante debe abordarse con una revisión honesta y cambios significativos.
El verdadero desafío implica recuperar la confianza de la población en el sector privado y en los empresarios. Esta conexión resulta esencial para restablecer la estabilidad social y generar un crecimiento sostenible a corto, mediano y largo plazo. En un contexto de inestabilidad política y cambios frecuentes de liderazgo, la estabilidad social se convierte en un pilar fundamental para el desarrollo.
La propuesta de Correa va más allá de las palabras, instando a las empresas a involucrarse directamente en mejorar las condiciones de las comunidades. Desde la infraestructura educativa hasta la seguridad ciudadana, la colaboración entre empresas es esencial para maximizar resultados positivos. El uso de recursos legales, como programas de «Obras por Impuestos», y acciones conjuntas entre el sector público y privado son parte fundamental de esta iniciativa.
Correa destaca la necesidad de cambiar regulaciones que obstaculizan el progreso de las personas y empresas. La unión empresarial se presenta como medio para superar la fragmentación y lograr impactos significativos en áreas críticas. Potenciar gremios empresariales y centros de pensamiento impulsará cambios positivos, evitando que grupos mercantilistas perpetúen políticas perjudiciales.
El llamado a la acción colectiva del sector empresarial es claro: ¿Podemos hacer más de lo que hacemos actualmente? La respuesta es afirmativa. Correa insta a marcar la diferencia para evitar el regreso de gobiernos populistas mediante la unión. La repetición de las mismas acciones no generará resultados diferentes; es hora de innovar y colaborar para construir un futuro más próspero.
Los empresarios en América Latina enfrentan desafíos compartidos que requieren respuestas colectivas. Aprender de los errores del pasado y evitar gobiernos populistas es crucial para superar la desconfianza y la desigualdad. Transformar las palabras en acciones, reconectar con la sociedad y demostrar compromisos genuinos son las claves para construir sociedades justas y sostenibles.
En última instancia, «Creer para Volver a Crecer”, más que un lema, es un llamado a la acción que puede cambiar el rumbo de las naciones en América Latina. Los desafíos globales demandan respuestas que surgen de acciones locales y personales. La participación activa de los empresarios es crucial para superar las dificultades, promover la confianza y contribuir al crecimiento económico necesario para construir un futuro próspero para todos.