Un mito gestado por el año 1958, denominado fue: “El suicidio de los Lemmings” y que vía un documental filmado nada menos que por Disney, el mismo se acrecentó y el film fue al año siguiente premiado en el Festival del Cine en Berlín, además de ganar un Oscar al mejor documental.
El Lemmini de la tribu de los roedores miomorfos, más conocido como los Lemmings, pueblan el Ártico en tundras en Alaska, Siberia y Noruega. El animalito se nutre de hierbas, raíces y frutos y tiene como cosa curiosa su inmensa capacidad de reproducción en los inviernos crudos, lo que increíblemente puede exponenciar en 10 veces su población.
El hecho que la misma se reduzca en tan sólo un año de manera impresionante, ha creado el mito del suicidio colectivo al arrojarse al mar para auto regular su especie. El documental de Disney denominado “White Widerness “es decir: “La Blanca Tierra Salvaje”, mostró esta supuesta realidad en el año 1958.
En el año 1982, Brian Vallae, productor de la Canadian Broadcasting Corporation, publicó en la Revista Fifht State que los realizadores del documental en Alberta Canadá, habían comprado, en sitios alejados del lugar de la filmación, un montón de Lemmings, a los cuales filmaron sobre una capa de nieve que ellos montaron e indujeron a los animalitos a tirarse asustados al río, pues en esa localidad no había mar. Así que el mito se destruyó.
Todo quedó en una leyenda urbana. Disney no recibió ningún juicio o castigo porque no había pruebas palmarias de lo acontecido y porque además en aquella época no había contra los cineastas el cuidado con los animales, ni ambientalistas que los defendieran. En rigor los científicos aducen que la reducción poblacional de los Lemmings se debe a varios factores, entre ellos la falta de alimento y la acción de los depredadores e incluso las cruzadas que hacen cuando salen de su hábitat y cruzan los ríos y se ahogan. Pero no está probado que haya suicidio alguno.
En rigor entonces, un mito alude a una historia fabulosa de tradición oral que explica, por medio de la narración, las acciones de seres que encarnan de forma simbólica fuerzas de la naturaleza, aspectos de la condición humana, etc. Y se aplica especialmente a la que narra las acciones de los dioses o héroes de la Antigüedad.
Asimismo, se puede entender por mito una historia imaginaria que altera las verdaderas cualidades de una persona o de una cosa y les da más valor del que tienen en realidad.
Uno de los mitos de antaño, es aquel que el avestruz esconde la cabeza en un agujero bajo tierra, lo cual es ciertamente falso. Y es que el mito aparece al observar su comportamiento: A veces para esconderse esta ave de gran tamaño , se acurruca posando el cuello y la cabeza a ras del suelo, de tal modo que a cierta distancia pasan desapercibidas como si de un montón de tierra o hierba se tratase.
Otro mito es aquello que se le atribuye al sabio Raimondi, de que el Perú es un mendigo sentando bajo un banco de oro. En este caso particular, de Antonio Raimondi; Giovanni Bonfiglio en Lima, en agosto del año 2,009, presentó un magnífico ensayo con las reflexiones surgidas a partir de un estudio realizado sobre la figura de este sabio, donde se ha constatado la falsedad de la frase aludida de que: “El Perú es un mendigo sentado en un banco de oro”.
Esto ha motivado una serie de consideraciones que han derivado en el uso del concepto de “paradigma mental”, en cuanto recurso teórico que puede explicar comportamientos sociales difundidos. El propósito del ensayo era compartir ideas y motivar la discusión.
Y, finalmente, hay mitos en el área de la macroeconomía, como aquella de creer a rajatabla que tener un PBI siempre in crescendo o una balanza comercial positiva o si se quiere un superávit fiscal o que le den a ministros de economía o al presidente del Banco Central premios de parte de revistas extranjeras o nos alabe la gente del “Establishment” de Wall Street en un campanazo O que son OK. los indicadores del “Riesgo País” es muy bueno. Y eso no es del todo verdad.
Un claro ejemplo de esa “bondad es el ” tomar una pastilla de aspirina diaria pues ello es OK para el corazón, tal cual hemos visto en la TV y revistas ,como propaganda, y ello puede traer ulceras u otro tipo de enfermedades más grave O como señala la BBC Mundo que dice que beber demasiada agua puede ser perjudicial para tu salud y deja de lado que es buena para la piel y cuanta macana se señala por allí con demás 8 vasos diarios y en muchos casos, puede influir de forma negativa en la recuperación del paciente y hasta de la persona sana que puede generar hasta una hiponatremia, la que es una condición que ocurre cuando los niveles de sodio -un electrolito que ayuda a controlar la cantidad de agua en las células- en la sangre están por debajo de lo normal y que en situaciones extremas, puede provocar la muerte.
Finalmente, en lo que respecta al concepto de desintoxicación, la Asociación Dietética Británica considera que la idea no tiene sentido.
«No hay bebidas ni pastillas que hagan magia. El cuerpo tiene varios órganos que se encargan de desintoxicar al cuerpo continuamente: la piel, los riñones, el hígado y los intestinos», refiere un portavoz de la organización: «La desintoxicación es un mito publicitario, no un hecho nutricional. Requiere ayuno y consumo excesivo de líquidos, lo que puede reflejar una pérdida de peso en la balanza, pero lo que se elimina en estos casos es agua, músculo y los carbohidratos que el cuerpo almacena, no grasa».
Hay mucho mas de mitos que cautivan a la gente y además de gastar dinero y tiempo traen los consabidos “Efectos Secundarios” y antes que eso incluso los de orden primario. Estamos pues adheridos hoy más que nunca que la IA y las redes fabrican las denominadas “Fake News”.
