El reciente Foro Económico Mundial, nos alerta de los principales riesgos globales, para los próximos diez años, todos ellos, ambientales: pérdida de biodiversidad, cambio climático, escasez de recursos naturales y la contaminación, que nos lleva a pérdidas de empleos, migraciones y recesiones económicas.
La inestabilidad política y el bajo nivel de la gestión pública, que destaca a este gobierno, no permite atender, lo importante y urgente, que además de la inseguridad ciudadana, es la gestión del agua y saneamiento, sino se dan soluciones sostenibles, se pone en riesgo a las generaciones futuras, considerando que nuestro país, es el octavo país del mundo por volumen de agua dulce y tercero de América Latina, es decir, tiene agua suficiente, pero con una distribución que no guarda relación con los asentamientos poblacionales
- 70% de la población con 2% de la disponibilidad hídrica en la vertiente del Pacífico, y, 26% de la población con un 97,4% de la disponibilidad hídrica en la vertiente del Atlántico.
- Retroceso dramático de glaciares: Cordillera blanca, Vilcanota, Carabaya, Qoylluriti, otros.
- Zonas con escasez extrema: cuencas del Chillón, Rímac y Lurín que abastecen la capital y, a los departamentos de Tacna e Ica.
- Proyectos de trasvase truncos desde 1980.
- El sector agrícola utiliza el 80% el recurso agua, la minería un 2% y el resto la población.
- 50% de los peruanos no tiene acceso al agua segura.
- Incremento de la contaminación de ríos, por la minería informal y vertimientos de aguas residuales de poblacionales e industriales.
- Fiscalización ineficiente al uso del recurso agua.
Una propuesta de medidas priorizadas, para el corto plazo, en la gestión del recurso agua, para asegurar el desarrollo sostenible y bienestar de la sociedad peruana:
- Implementar una Política de Estado, que contribuya al manejo del agua, mediante la promoción de la inversión privada en infraestructura y una gestión eficiente.
- Darle autonomía a la ANA, con un claro liderazgo de la PCM; en extremo, transferir su gestión al MINAM.
- Construir represas en las partes altas de los valles, para garantizar el suministro y desarrollo de la población y de la agricultura en la costa y valles interandinos.
- Hacer el reúso de aguas residuales, como en su oportunidad optaron Singapur, California
y Barcelona.
- Promover el uso de tecnología inteligente en la gestión del uso y reúso del agua.
- Sancionar el uso de agua potable en el riego de parques y jardines, modificando el Código Penal.
- Promover desde el kínder, el valor al agua y su uso responsable.
Una medida más audaz, para un largo plazo sostenible, es la creación de un Ministerio, que contribuya a enfrentar los riesgos globales ambientales, uniendo los quehaceres vinculados a la gestión de los recursos naturales, que actualmente realizan, el MINAM, el MIDAGRI, el MINEM, la ANA y la AMN y, asumir la gestión directa de las cuencas y de las aguas marítimo terrestre; como existe en España, a través del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
(*) Expresidente de la República