Por: Martín Valdivia Rodriguez / Si la dirigencia de Fuerza Popular (FP) pretende acudir a organismos extranjeros para que atiendan el caso de injusticia contra Keiko Fujimori, será mejor que descarten cualquier institución vinculada a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, una entidad plagada de caviares que poco o nada harán por resolver la situación judicial de la lideresa del partido naranja. Lo mejor será acudir a entes plenamente democráticos y de reconocido prestigio, además de medios de comunicación independientes.
Como quiera que aquí en el Perú ya no existe más instancia que la de un sistema de justicia poco confiable, la nueva estrategia de FP debe incidir en denunciar a nivel internacional los abusos de los fiscales del caso Lava Jato contra Keiko, acudiendo incluso a jefes de Estado, instituciones de derechos humanos no contaminados como la Corte Interamericana y medios de comunicación masivos. Este cometido ya lo adelantó ayer el secretario general de Fuerza Popular, Luis Galarreta, quien adelantó que un grupo importante de militantes de FP viajarán por gran parte del mundo para exponer este caso sui generis contra su lideresa.
“La respuesta tiene que ser política, internacional, mediática”, dijo Galarreta, quien no ocultó su malestar por el nuevo encierro de la señora Fujimori. Y es que tiene que ser así. Si se cierran las puertas del país, están abiertas las del extranjero, la idea- entendemos- es no quedarse callados y exponer al mundo esta condición de injusticia.
Ya lo dijimos ayer, el objetivo de los enemigos del fujimorismo es dejar fuera de carrera a Keiko. No hay que ser mago para ver esta realidad tan contundente. Encerrarla es la mejor manera de bloquearla como posible candidata presidencial para el 2021. La caviarada sabe que tenerla libre es igual a perder espacio y, por lo tanto, poder.
Y ello se ha podido comprobar esta última votación al Congreso, donde FP tuvo un modesto cupo de parlamentarios. La falta de un liderazgo que aglutine tanto a candidatos como a la propia militancia fue más que evidente durante este proceso electoral, pues estamos seguros que con la lideresa libre y con todas sus facultades otro hubiera sido el devenir de las cosas. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.