Reino Unido se ha convertido en el primer país europeo en eliminar gradualmente este tipo de comercio
El Parlamento del Reino Unido aprobó el pasado 14 de Mayo el proyecto de ley que buscaba prohibir la exportación de animales vivos como vacas, ovejas y cerdos que eran utilizados para entretenimiento o sacrificio. Con esta histórica decisión, Reino Unido se convierte en el primer país europeo en eliminar gradualmente este tipo de comercio. Otros Países como Nueva Zelanda, Australia y Brasil ya habían tomado la misma medida hace un tiempo atrás.
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La resolución se produjo tras una consulta gubernamental dada en el 2020 que reveló un apoyo abrumador a la prohibición, con un 87 % de los encuestados a favor del proyecto. De acuerdo con los datos brindados por la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA), 1,6 millones de animales eran exportados anualmente desde el Reino Unido, teniendo que soportar viajes de gran trayectoria, sumándoles el miedo, dolor, hambre, deshidratación, lesiones, agotamiento y depresión por estar siendo trasladados en jaulas bajo circunstancias nada favorecedoras. Agregándole por supuesto el maltrato de las personas.
Kerry Postlewhite, subdirectora de campañas y prevención de la RSPCA, celebró la decisión tras 50 años de campaña y mencionó que Es muy importante que Gobierno del Reino Unido haya decidido tomar cartas en el asunto con esta crueldad hacia los animales. De igual manera, organizaciones que velan y se preocupan por el bienestar y la protección de los animales como Compassion in World Farming (CIWF) y Kent Action Against Live Exports (KAALE) también expresaron su alegría con la decisión.
Los animales que se han visto como accesorios durante tanto tiempo representaban un 1,92% de todo el comercio mundial. Con esta nueva medida que ha impuesto el Reino Unido se siguen sumando actos benéficos que pertenecen a un movimiento global que busca poner fin a la crueldad de la exportación de animales vivos. Recientemente, Brasil prohibió las exportaciones de vacas y terneros vivos, y en Nueva Zelanda entró en vigor la prohibición a todas las exportaciones de vacas, terneros, ovejas ciervos y cabras por vía marítima. Esto demuestra que aun hay personas compasivas en el mundo que quieren proteger a los animales. Pero esto no quiere decir que ahí debemos parar, aún falta mucho más por hacer.
