Tras rechazos, trabajadores motorizados lograron sindicalizarse. Demandarán cambios en el manejo de propinas por empresas como Pedidos Ya y Rappi
El miércoles 29 de noviembre pasado, los repartidores de delivery que trabajan para empresas como Rappi, Pedidos Ya y otras aplicaciones móviles, registraron su sindicato en el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE).
En la actualidad, alrededor de 7.000 trabajadores en moto forman parte del Sindicato Nacional de Trabajadores de Plataformas Digitales del Perú. Harvey Buitrago, su secretario general, describió el extenso proceso que atravesaron durante los últimos tres años para lograr el registro del sindicato. Su meta es reclamar el reconocimiento de sus derechos laborales como trabajadores independientes.
Durante una entrevista con Panamericana Televisión, Buitrago mencionó que presentaron en varias ocasiones los documentos requeridos por el Ministerio de Trabajo para concretar la inscripción. Sin embargo, cada intento era seguido por observaciones de las autoridades estatales que solicitaban correcciones específicas.
«Esto sucedió en múltiples ocasiones, hasta que finalmente se nos negó la inscripción del sindicato. Apelamos y la instancia legal superior determinó que el Ministerio de Trabajo estaba equivocado, ordenando así la inscripción, la cual se efectuó el miércoles», añadió durante su participación en 24 Horas.
Lee aquí:
ATU ofrece paraderos preferenciales para usuarios con necesidades especiales
Repartidores luchan por derechos ante apps de delivery
Mientras buscaban registrarse, los repartidores también intentaban entablar un diálogo con los responsables de las empresas de aplicaciones de delivery, ya que alegan que no están respetando sus derechos laborales. A pesar de llevar a cabo numerosas protestas, hasta ahora no han recibido la respuesta que esperaban.
En este sentido, Buitrago mencionó que cuando protestaban contra las compañías, sus directivos optaban por bloquear sus cuentas. En el caso de Rappi, se les negó la posibilidad de hablar con sus representantes argumentando que su sede estaba siendo fumigada.
Él reiteró que no están dispuestos a trabajar como empleados dependientes de estas empresas y que seguirán siendo trabajadores independientes.
«Somos trabajadores independientes y conforme al marco legal del trabajo independiente, buscaremos reivindicaciones. No podemos seguir aceptando que nos reduzcan las tarifas, que cuando vamos a la sede de Rappi a protestar nos cierren la puerta, que argumenten fumigación. No podemos aceptar el trato humillante que recibimos de estas aplicaciones, ya sea por correo o en persona, nos tratan de manera desagradable», enfatizó.
Repartidores luchan por tarifas justas y propinas aseguradas
El representante sindical señaló que la empresa no atiende sus reclamos y, en cambio, responde con mensajes xenófobos a las demandas de los repartidores migrantes.
Con la formación del sindicato, buscarán aumentar la tarifa por cada entrega de delivery. En los últimos años, esta tarifa ha descendido de S/1.60 a solo 70 céntimos.
«El pago por kilómetro ha bajado de S/1.60, S/1.50 a 70 céntimos, con una tarifa base de un sol al llegar a la tienda y S/1.20 al entregar. Más o menos es así. Van reduciendo (la tarifa) y comienza la competencia entre trabajadores. Eliminan salarios fijos o tarifas estables para fomentar la competencia entre ellos y nos ofrecen incentivos», explicó.
Estos incentivos consisten en ofrecer S/80 si completan tres entregas en una hora. Sin embargo, las aplicaciones asignan destinos muy lejanos, lo que hace imposible que los repartidores cumplan la meta y obtengan el dinero ofrecido.
Además, solicitarán medidas para que las propinas no sean controladas por las empresas de aplicaciones, ya que no aseguran que estas lleguen al repartidor designado por el cliente.
«Nos están quitando las propinas. Clientes, por favor, no dejen propina a través de las aplicaciones. Las aplicaciones manipulan las propinas, las entregan a otros repartidores que quizás no recibieron propina para igualar», advirtió.
Lee aquí:
Mininter insta a bodegueros de Lima y Callao a denunciar extorsiones sin miedo
