PERO MINISTRA DE SALUD NO LO CONSIDERA UNA EPIDEMIA
En lo que va del año se han registrado 548 casos del síndrome Guillain Barré a nivel nacional, de acuerdo al Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades del Ministerio de Salud (Minsa). De estos, 163 se han presentado solamente en Lima.
Pese a esta situación, la ministra de Salud, Zulema Tomás, dijo que la incidencia de casos del síndrome de Guillain-Barré es un “brote atípico”, pero no constituye una epidemia.
“Esta incidencia atípica del síndrome de Guillain-Barré quiere decir que es inusual. Normalmente deberíamos tener a la semana un reporte de hasta 10 casos, pero en esta semana estamos teniendo incrementos del 40 al 50 por ciento”, señaló.
Durante este año, se reportaron casos en las siguientes regiones: Áncash, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Callao, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, La Libertad, Lambayeque, Lima, Loreto, Madre de Dios, Cerro de Pasco, Piura, Puno, San Martín, Tacna y Tumbes.
Del total, más de 400 se han registrado únicamente en el mes de junio. Todos los datos fueron registrados hasta el mediodía de este jueves.
La cifra es bastante mayor a comparación de la registrada en 2018, que alcanzó los 341 casos también en todo el Perú. El año pasado, en junio se registraron solo 41 casos.
El año pasado, mes que más casos tuvo fue mayo, con 105 registrados.
Este es el desagregado de casos por mes en el 2019: Enero: 17, Febrero: 11, Marzo: 18, Abril: 20, Mayo: 48, y Junio: 433.
¿CÓMO SE ADQUIERE?
La enfermedad está asociada a un virus de tipo Coxsackievirus, un enterovirus que produce parálisis. El virus se transmite principalmente por la boca y las manos. Sin embargo, aún no se ha identificado un agente infeccioso que lo cause.
El síndrome de Guillain-Barré afecta directamente al sistema nervioso y reacciona dependiendo del organismo de cada persona, es una enfermedad más frecuente en personas adultas mayores.
“Si el paciente tiene las defensas bajas y se expone a un ambiente infectado o contaminado, no goza de una buena alimentación y/o no realiza prácticas de higiene personal tan simples como el lavado de manos, son personas vulnerables a virus y bacterias ambientales altamente propensas a despertar este síndrome”, precisó el neurólogo Hugo Villa Becerra.