La sentencia incluye prisión efectiva, inhabilitación para ejercer cargos públicos y el pago de reparación civil por actos de corrupción vinculados al Clan Orellana.
El Poder Judicial sentenció a cinco años de prisión a Rodolfo Orellana por sobornar al exfiscal Eduardo Egusquiza con USD 4.000. El soborno buscaba archivar una investigación por falsificación de documentos. Su hermana Ludith Orellana recibió la misma condena.
Por su parte, Egusquiza Castro, quien ganó el soborno, fue condenado a seis años de prisión por cohecho pasivo específico.
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El caso y sus implicaciones
En febrero de 2013, Egusquiza contactó al policía Luis Siesquén, vinculado al Clan Orellana, para solicitar 4.000 dólares. La entrega del soborno ocurrió en septiembre de ese mismo año, buscando favorecer a la organización criminal que enfrentaba cargos por falsificación de documentos.
La sentencia incluye, además de la privación de libertad, la inhabilitación de los implicados para ocupar cargos públicos.
Reparaciones civiles y sanciones
El exfiscal Egusquiza deberá pagar una reparación civil de S/ 25,000, mientras que los hermanos Orellana tendrán que abonar S/ 50,000 cada uno. Estas buscan medidas para resarcir al Estado y prevenir futuras prácticas corruptas.