Según el Ministerio Público, entre los 13 fallecidos, 11 habrían salido positivos por el COVID-19. El presidente Martín Vizcarra lamentó la tragedia y expresó su «cólera por la irresponsabilidad» que tuvieron los organizadores de la fiesta de la discoteca Thomas Restobar.
El domingo se conoció que de los 13 fallecidos en la noche trágica del sábado, en la discoteca “Thomas Restobar” de Los Olivos, 11 habrían estado contagiados por el COVID-19, esto lo dio a conocer el Ministerio Público. La pericia se encontraba a cargo del Instituto de Medicina Legal. Entre los fallecidos, 12 eran mujeres y uno varón, quienes murieron asfixiados a causa de la estampida que se produjo en la discoteca.
En el comunicado se explicó lo siguiente: “Las necropsias se llevarán a cabo el lunes 24 de agosto, en cumplimiento a los procedimientos de bioseguridad exigidos en estas circunstancias, sobre todo porque se han identificado 11 cadáveres infectados con el virus”
Como se sabe, la Policía allanó la discoteca la noche del sábado y se encontraron al menos un grupo de 120 personas que estaban participando de una fiesta que fue convocada a través de las redes sociales. Violando evidentemente la prohibición de reuniones grupales que se decretó en el Perú debido al estado de emergencia sanitario por el que se encuentra atravesando el país por el COVID-19. Se sabe que de las 23 personas detenidas 15 dieron positivo a la prueba rápida.
El presidente Martín Vizcarra pidió una rigurosa investigación y una “sanción ejemplar” para los dueños de la discoteca de Los Olivos. El fiscal provincial Carlos Díaz Casimiro, titular del Cuarto Despacho de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Los Olivos, es la persona que se encuentra a cargo del caso y dirige las diligencias.