Putin visitó clínica militar para inspeccionar las condiciones en las que son tratados los soldados
El presidente ruso, Vladímir Putin, visitó una clínica militar de Moscú donde se encontraban soldados heridos en la «operación militar especial» rusa en Ucrania.
A la visita, también acudió el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, con quien inspeccionó las condiciones en las que son tratados los heridos llegados del frente.
Asimismo, el mandatario dialogó con los hospitalizados, a quienes brindaba palabras de aliento y reconforte.
«¡Se sentirá orgulloso de su padre!«, dijo Putin a uno de los militares, quien explicó que tiene un hijo de 9 meses.
Otro de los heridos, con quien charló el jefe de Estado, recibió una herida de metralla en el hombro y otro un disparo en el abdomen.
De igual manera, también conversó con el personal sanitario de la clínica, quienes explicaron que todos los heridos en combate se están recuperando y pronto iniciarán el proceso de rehabilitación.
¿Baja en sus filas?
Desde hace dos meses que el Ejército ruso no informa de bajas en sus filas. La última vez que lo hizo fue el 25 de marzo, cuando Moscú cifró los 1.351 caídos.
Por su parte, los ucranianos estiman en miles los soldados rusos muertos desde el mes de febrero, motivo por el que Putin habría optado por «minimizar» las bajas, dando prioridad en su ofensiva a la aviación y la artillería.
Según la inteligencia británica, los rusos habrían perdido tantos soldados en tres meses -unos 15.000 hombres- como el Ejército soviético durante los diez años de Guerra en Afganistán.
En tres meses de combates el ejército de Rusia, no ha logrado doblegar la resistencia ucraniana en la región de Donetsk, aunque sí ha podido abrir en el sur de Ucrania un corredor terrestre con la anexionada península de Crimea.
