La presidenta del Congreso espera que no haya cuestiones de confianza
La presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, aseguró que el voto de confianza que se le otorgó al gabinete encabezado por Guido Bellido es un voto “vigilante y de fiscalización”, y que el respaldo que Acción Popular le otorgó no es un “cheque en blanco”.
“Es un voto de confianza vigilante, con fiscalización, que es una de nuestras funciones por lo que creo que de aquí en adelante tenemos que enfocarnos en una agenda legislativa común que es la que ya he anunciado y que estamos planteando y debe estar en la próxima semana”, mencionó.
La titular del Poder Legislativo, de otro lado, dijo esperar que las cuestiones de confianza que el Gobierno pueda plantear no se den con una finalidad de disolver el Parlamento, al recordar que el mismo presidente Pedro Castillo descartó que esta sea una intención del Ejecutivo.
“Lamentablemente (la cuestión de confianza) siempre ha debido ser solo por políticas generales del gobierno y por el tema de Vizcarra sabemos que se abrió la puerta para que cualquiera pueda decir y presentar una cuestión de confianza. Espero que eso no ocurra”, exhortó.
“En el Acuerdo Nacional, el presidente delante de todos los miembros se dirigió a mí y me dijo que no pensaba de ninguna manera disolver el Congreso. Creo que son palabras, veremos en los hechos y los actos en general cómo se comporta el Poder Ejecutivo”, señaló Alva.
Como se recuerda, 73 congresistas votaron a favor y 50 en contra (cero abstenciones) de otorgar el voto de confianza al gabinete presidido por Guido Bellido. Las bancadas que votaron en contra fueron Fuerza Popular, Avanza País, el Partido Morado y Renovación Popular. Esta última agrupación anunció que seguirá planteando interpelaciones contra los ministros, así como mociones de censura.