La política de austeridad pretende reducir los “gastos excesivos” en todos los niveles del Gobierno
El Gobierno peruano ha tomado medidas drásticas para reducir el déficit fiscal y asegurar la sostenibilidad económica del país. A través de un decreto de urgencia, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) optó por medidas extraordinarias en materia económica con el objetivo de lograr el equilibrio presupuestario y la eficiencia del gasto público.
“[Además], se ha tratado de restringir algunos gastos excesivos que no le hacen bien a la gestión pública. Ahí vemos gastos en vehículos, algunas contrataciones, combustibles, ceremonias, viajes. Estas cosas se ha tratado de reducir al mínimo. (…) Por ejemplo, en los gobiernos regionales, solamente el titular del pliego tiene derecho a usar un vehículos, los demás no, algo que se ha ido perdiendo con el tiempo. Hemos retomado esa restricción“, indicó el titular del MEF, José Arista.
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Estas medidas implican una serie de restricciones y limitaciones en diversos aspectos del gasto público.
¿Cuáles son las disposiciones del Gobierno?
- Restricción de gastos no críticos: límite en el aumento del gasto ejecutado para el año 2024 en comparación con el monto devengado en 2023 en áreas como telefonía celular, viajes al interior y exterior del país, adquisición de uniformes, gastos en publicidad e imagen institucional, entre otros.
- Control del gasto en vehículos: prohibición en la adquisición de vehículos automotores durante el 2024, excepto para los titulares de las entidades y aquellos destinados a seguridad ciudadana y otros fines específicos.
- Reducción de gastos excesivos: reducción de gastos considerados excesivos en áreas como combustible, ceremonias, consultorías, seminarios y talleres organizados por las instituciones, entre otros.
Gracias a estas medidas, el Ejecutivo busca un cambio en la política económica del Gobierno, con un enfoque en la optimización del gasto público y la eliminación de prácticas que no contribuyen a la eficiencia y la sostenibilidad fiscal.