La suspendida fiscal, Patricia Benavides, rechazó el informe de la magistrada Inés Tello que recomienda su destitución.
“Me dirijo a todos los peruanos que confiaron y confían en mi trabajo. También a mis críticos que no me dejaron ni un solo día de tregua, con un asedio desproporcionado cuando se afectaban sus intereses políticos”, mencionó.
Según dijo, ‘pensaron’ que dejaría que controlen la información de las carpetas fiscales y que se decida la justicia según sus posiciones editoriales o de sus amigos de turno.
“Siempre dijimos que la instructora (Inés) Tello incumplía el deber de imparcialidad, pero mezclaron los hechos y confundieron los argumentos como suelen hacer para tratar de engañar a la ciudadanía. Mi defensa técnica acudió al proceso de amparo por una clara imparcialidad de Tello y (Aldo) Vásquez”, refirió
Cuestionó que el informe final que se analizará el jueves 18 de abril “de forma exprés es “la concreción de ese atropello a mi debido proceso”.
“Rechazamos ese informe por ser sesgado, arbitrario y tendencioso. La instructora de la JNJ, que no es fiscal ni juez, ha quebrantado el orden jurídico, dando por corroborados por dichos por un colaborador eficaz”, dijo Benavides.
Para la fiscal suspendida, esos ‘dicho’ requieren de un alto nivel de corroboración para condenar o aplicar una sanción de destitución, “el cual pretenden aplicarme ahora”.
“No tengo miedo a la destitución, pero no puedo ser pasiva a la arbitrariedad (…) Durante mi gestión no he cambiado fiscales para favorecer a nadie; nunca he cuestionado que la Junta Nacional de Justicia tenga competencia disciplinaria; y tampoco que haya un vacío de control de los actos de fiscal de la Nación”, remarcó.
Insistió que nunca buscó la ‘impunidad’, y que por eso reafirma que los actos de gobierno y de gestión del Ministerio Público deben ser controlados por un órgano con potestad jurisdiccional y no una institución administrativa como la JNJ.