Canadá ha suspendido hasta el 6 de enero todos los vuelos desde Reino Unido tras la aparición de la nueva cepa en el país europeo.
Este miércoles 30 de diciembre, varios ministros durante una rueda de prensa anunciaron que los viajeros que ingresen a Canadá deberán ingresar con una prueba negativa de coronavirus (covid-19).
«El gobierno exigirá rápidamente una medida adicional que requerirá que todos los pasajeros que lleguen a Canadá se realicen una prueba de detección de COVID-19 que sea negativa”, indicó Dominic LeBlanc, ministro de Asuntos Intergubernamentales.
Esta nueva medida se da, debido que la semana pasada el país de Canadá detectara varios casos de una nueva variante del coronavirus que circula en Reino Unido. Por este motivo en el país europeo se ha suspendido hasta el 6 de enero todos los vuelos tras la nueva cepa.
Por ello, los que lleguen a Canadá, sean del país mencionado o no, deberán realizar una cuarentena obligatoria de 14 días, en caso no se cumple con esta norma, pueden asumir una multa de hasta 750.000 dólares canadienses (587.000 dólares estadounidenses) y/o valerse de hasta seis meses de prisión preventiva.
“Aunque la mayoría de los canadienses han seguido las recomendaciones decretadas por el estado, algunos todavía viajan por motivos no esenciales. Esto es muy preocupante”, añadió Howard Njoo, subdirector de salud pública.
Por último, Las fronteras de Canadá han permanecido cerradas desde inicios de marzo para los extranjeros, excepto de aquellas que tengan la urgencia de viajar a su territorio se considera esencial.
“Sólo alrededor del 2% de todos los casos reportados de covid-19 en Canadá provienen de viajes fuera del país”, sostuvo LeBlanc.
