Expertos afirman que es necesario examinar la excesiva cantidad de miembros en el Parlamento
En junio de 2023, la previa Junta Directiva del Congreso (liderada por José Williams) dio su aprobación a otorgar una calificación excepcional al personal de confianza de la Organización Parlamentaria. El monto de esta beneficio oscilaba entre S/7,200 y S/14,400. A pesar de que esto fue motivo de noticia, no generó sorpresa, dado que no era la primera ocasión.
En efecto, apenas en abril del mismo año se había aprobado una asignación de S/9,900 para todos los empleados activos del Servicio Parlamentario y la Organización Parlamentaria, y existían varios ejemplos similares en legislaturas previas.
Trabajar en el ámbito legislativo parece representar una ocasión favorable para obtener beneficios económicos. La información correspondiente al tercer trimestre de este año reveló que un total de 3,375 personas estaban empleadas hasta septiembre.
Esto incluye a empleados, funcionarios, expertos, técnicos y asistentes vinculados a los regímenes de los Decretos Legislativos (DL) 728, 276 y 1057 – CAS.
Este número es aproximadamente un 17% más alto que lo que se observaba en el mismo período de 2021, cuando comenzó el actual período parlamentario (2021-2026).
Si lo contrastamos con las cifras de hace una década, en septiembre de 2013, se contabilizaban 2.477 empleados, según lo informado en el portal del Parlamento.Es importante destacar que estos análisis no incluyen los jubilados durante estos años.
Durante el tercer trimestre, se destinaron S/70′811,417.93 en sueldos y pensiones, con datos actualizados hasta septiembre. Este valor representa un aumento de S/20 millones (equivalente al 40%) con respecto a los S/50′271,778 registrados hace dos años.
A pesar de que con frecuencia se argumenta desde el ámbito legislativo y por sus partidarios que los gastos en esta entidad son inferiores a los de otras entidades gubernamentales, Alejandro Rospigliosi, un experto en derecho parlamentario, afirmó que esta declaración no constituye una razón válida para mantener una cantidad tan considerable de trabajadores.
«Tenemos una sobrepoblación laboral. Hay trabajadores que marcan, están de pie un rato, luego en la cafetería. No se justifica que haya tanta gente», expresó.
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Asmismo, consideró que los servidores parlamentarios que están nombrados «deben tener asignaciones en las que se justifique que estén ahí para que no haya la necesidad de contratar a terceros».
«Hay que utilizar mejor a los que son nombrados porque el hecho de tener esta condición no significa que cuentas con una corona. En caso de que ellos no quieran realizar una labor asignada, se les puede abrir un proceso disciplinario y tomar una decisión sobre su posible salida», agregó.
