El Barcelona se ha caracterizado por hacer malos contratos en los últimos años.
El Barcelona el día de ayer oficializó la salida del jugador brasileño al Aston Villa, y con esto vuelve a hacer una mala negociación. La venta fue de 20 millones de euros, el club “culé” había pagado al Liverpool, exequipo del jugador, la suma de 180 millones de euros en el 2018. En su momento el jugador llego como una estrella y listo para brillar, pero las lesiones y los pocos minutos hizo que lo cedieran a varios clubes y nunca terminó de encajar en el conjunto “catalán”.
Con esta venta el club español vuelve a hacer malos negocios con los jugadores. Podemos poner en la lista a Dembélé, el cual lo compraron por la cantidad de 138 millones de euros para ser el reemplazante de Neymar, que se había ido al París, pero se las pasó más en el hospital y en tratamientos que jugando. Y encima el jugador no va a ser renovado debido a que pide un aumento de sueldo.
También en el 2015 el club desembolsó al Atlético de Madrid la cantidad de 34 millos de euros por Arda Turan, que venía de ser figura en esa temporada. Pero en el conjunto “baulgrana” no pude jugar en los primeros seis meses debido a una sanción de la FIFA, y cuando pudo volver a jugar no fue la sombra de lo que era y ni bien finalizo la temporada fue dejado libre y se marchó al Galatasaray.
El Barcelona vuelve a hacer el papelón con los fichajes, pero los aficionados ven con buenos ojos la siguiente temporada por el mejoramiento del juego desde la llegada de Xavi, el cual no solo tuvo buenos resultados, sino que mostró un buen juego que los puso del séptimo lugar de la tabla a la parte más alta.