El fallo del Tribunal Supremo de Brasil en contra Daniel Silveira supone un golpe al presidente.
El Tribunal Supremo brasileño condenó este miércoles por la noche a 8 años y 9 meses de penitenciaría al diputado bolsonarista Daniel Silveira, un ex policía indisciplinado, por atentar de forma continuada contra las instituciones democráticas. La mera condena, que fuera adoptada por una mayor parte de 10 magistrados a uno implica un varapalo al mandatario Jair Bolsonaro, que ha protagonizado comunes choques con la máxima corte.
Los magistrados dejaron claro a lo extenso de la sesión que la situación iba muchísimo más ahí del parlamentario sentado en el banquillo y recalcaron que el fallo atañe a la custodia de la democracia y las instituciones, según informa el diario Folha de S. Paulo. Brasil festeja elecciones presidenciales y parlamentarias en 6 meses a medida que el mandatario siembra dudas sobre el sistema de votación.
Silveira es un antiguo policía militar que juntó decenas de sanciones a lo largo de sus años de servicio en el cuerpo humano y que consiguió ser escogido como diputado por Flujo de agua de Janeiro a lomos de la ola que llevó a Bolsonaro a la presidencia.
El parlamentario estaba imputado de incitar públicamente a la violencia, al cierre del Congreso y del Supremo por medio de una mediación militar por medio de la difusión de un vídeo el año pasado. Pasó unos meses preso y recientemente se atrincheró en la sede de la Cámara de Diputados para que la policía no le pusiera una tobillera electrónica. Su custodia ha sostenido en todo el proceso que los vocablos de Silveira estaban amparados en la inmunidad parlamentaria. Por cierto, el núcleo duro de los seguidores bolsonaristas lo estima un mártir de la independencia de expresión. Y el propio líder estima que la situación contra él es una ejemplificación del absolutismo de la corte.