El juicio abierto previamente no llegó a un buen acuerdos. Discusión divide a la sociedad ecuatoriana.
Se ha abierto el juicio definitivo para separar los cargos de violación y aborto. Varias denuncias han sido realizadas por organizaciones de derechos de las mujeres como la Unión Nacional de Mujeres del Ecuador, Fundación Desafío y el Frente Ecuatoriano de Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos. Así, el 28 de abril de 2021, un tribunal dictaminó que el aborto por violación es legal en un país andino.
El Poder Judicial ha reformado las disposiciones sobre el delito de aborto en el Código Integral Penal, que desde 1983 establece que sólo las mujeres con retraso mental pueden abortar por violación. El fallo establecía que el parlamento sería responsable de presentar proyectos de ley dentro de dos meses y el parlamento de proporcionar instituciones legales dentro de seis meses. Llegó el día en que la Asamblea Nacional ecuatoriana debatirá el 25 de enero de este año. sobre el segundo informe del proyecto ecológico que garantiza la interrupción voluntaria del embarazo en casos de violación. Uno de los puntos finales de discusión y reconsideración es el tiempo. La edad gestacional de 28 semanas para el aborto se cambió a 22 semanas para mujeres menores de 18 años, 20 semanas para mujeres mayores de 18 años y no limitada a mujeres con discapacidad intelectual.
El proyecto de ley del Congreso es un esfuerzo conjunto de más de 100 organizaciones de derechos humanos, de derechos humanos y de la sociedad civil.
Surkuna es una de las agrupaciones feministas que lucha por la legalización del aborto en el país y acompaña a niñas, adolescentes y mujeres en su aborto. En su primer informe tras el fallo judicial, señaló que, hasta noviembre de 2021, 22 niñas habían solicitado abortar y 16 de ellas pudieron acceder a los servicios de aborto en el sistema público. Los cinco restantes tuvieron problemas con la presentación de denuncias y el proceso de revictimización en su contra.
Organizaciones de DD. HH. y colectivos feministas como SURKUNA, el Consejo de Protección de Derechos de Quito, entro otros, alertan que hay tres nudos críticos que ha generado polémica: la objeción de conciencia, requisitos y plazos. Agregan que esos temas ya fueron tratados y que la Comisión de Justicia, la encargada de debatir el proyecto, no ha tolerado la presión de grupos que se oponen al aborto.